La pregunta que plantea Don José Cobo: "¿Quién está en nuestro corazón que podemos presentar al Señor?"

El obispo auxiliar de Madrid, Don José Cobo Cano, ha compartido su reflexión sobre el Evangelio de este lunes de Cuaresma, día 23 de marzo; 

"Sin confianza no caminamos, sin confianza no hay signos ni posibilidad de entrar hondamente con Jesús. Es verdad que muchas veces andamos con el agua al cuello y que tenemos la necesidad de presentar todos nuestros agobios. Jesús los conoce, Jesús atraviesa la vida, atraviesa la entraña de los hombres y ofrece una dignidad profunda, pero quiere transitarla por un camino, el de la salud integral, el de la salud que comprende lo de dentro y lo de fuera. 

Hay dos espejos en este Evangelio  que podemos poner delante para entender lo que Jesús quiere de nosotros. El primero es el espejo de la multitud, una multitud que busca signos, que quiere caminar por un camino por el que Jesús no transita, que es el de "yo me merezco a Dios, yo soy judío por tanto tengo derecho a... ". Es decir, el de ir presentando cosas y quedarnos con la superficie.

Por su parte, hay otra imagen en la que nos podemos reflejar y ayudarnos. Es la del centurión, un romano etiquetado como sospechoso que se presenta ante Jesús con un corazón abierto, la herida de su niño. Y le presenta el dolor no suyo, sino el dolor por su niño. Nos recuerda a toda la gente que presenta el Señor tantos dolores de los que tiene alrededor, y los presenta con suma humildad. Con ello, nos enseña un tipo de fe que parte de un corazón abierto, que abraza los dolores de los otros y se presenta confiado con el Señor.

Por eso hay dos preguntas con las que nos podemos quedar en este Evangelio: ¿Quién está en nuestro corazón que podemos presentar al Señor? ¿Cómo es nuestra confianza en Dios?"