Tania Ávalos, la mujer viuda de la imagen viral de Río Grande: "Encuentro fuerza en la oración"

Tania Ávalos es una mujer salvadoreña que ha perdido a su marido, Óscar Alberto Martínez, de 25 años, y a su hija Valeria, de 23 meses. Ellos protagonizan la triste imagen de la crisis de la inmigración que está dando la vuelta al mundo: murieron tratando de cruzar el Río Grande, en la frontera de México, tratando de llegar a Estados Unidos. Tania visitó ayer la Casa del Migrante de la diócesis de Matamoros, en México, para dar las gracias por quienes la cuidan y atienden. Además, la recibió el obispo de la diócesis, Mons. Eugenio Andrés Lira Rugarcía, y juntos rezaron por ellos. 

El prelado ha contado a la agencia vaticana Vatican News que en el encuentro que mantuvieron, hablaron "largo y tendido". Entre los mensajes que intercambiaron, destacaron el agradecimiento de Tania a este servicio diocesano, su esperanza en Dios en estos momentos tan difíciles y la oración que compartieron. 

"Ella expresó su gratitud al personal de la Casa del Migrante, especialmente a los que la siguen en todas las prácticas y necesidades. Me edificó mucho su testimonio de fe. Me dijo que en estos momentos de gran sufrimiento encontró en la oración la fuerza para confiar en el amor de Dios y seguir adelante. Así que rezamos juntos por ella y por el eterno descanso de su esposo y su pequeña", explicó Mons. Lira Rugarcía.

Esta fotografía viene seguida de un nuevo mensaje de denuncia de los obispos por esta situación directo al gobierno de Estados Unidos. En esta ocasión, es el Cardenal Daniel DiNardo el que se une a Joe S. Vásquez, prelado de Austin, para denunciar el fracaso de la política migratoria estadounidense y la necesidad de responder de forma real al problema. 

"Esta consecuencia indescriptible de un sistema de inmigración fallido, junto con los crecientes informes sobre las condiciones inhumanas en las que los niños están bajo la custodia del gobierno federal en la frontera de Estados Unidos, sacude la conciencia y requiere una acción inmediata", se lee en la declaración. 

A continuación puedes leer el contundente mensaje de los obispos a raíz de la imagen de la muerte de un padre y su hija pequeña: 

Esta imagen silencia la política de inmigración

"Nos unimos al Santo Padre Francisco en su inmensa tristeza - dice la declaración conjunta - después de ver las horribles imágenes de Oscar Martínez y su hija Angie Valeria, ahogados en el Valle del Río Grande en un intento de escapar de la persecución y entrar a los Estados Unidos. Esta imagen grita justicia al cielo y silencia la política. ¿Quién puede mirar esta imagen y no ver los resultados de los fracasos de todos nosotros para encontrar una solución humana y justa a la crisis de la inmigración?" 

"Desafortunadamente - continúa la declaración - esta imagen muestra la situación diaria de nuestros hermanos y hermanas. No sólo su grito llega al cielo. Nos llega a todos y ahora debe llegar a nuestro gobierno federal. Todas las personas, independientemente de su país de origen o condición jurídica, están hechas a imagen y semejanza de Dios y deben ser tratadas con dignidad y respeto".

Condiciones inaceptables, especialmente para los niños inmigrantes

"Las recientes noticias de condiciones de insalubridad y hacinamiento son aterradoras e inaceptables para cualquier persona detenida en Estados Unidos, pero especialmente para los niños, que son particularmente vulnerables. Estas condiciones no pueden utilizarse como elemento disuasorio. Podemos y debemos seguir siendo un país que ofrece refugio a los niños y las familias que huyen de la violencia, la persecución y la pobreza extrema. El Congreso tiene el deber de proporcionar fondos adicionales para satisfacer las necesidades de los niños bajo custodia federal".

Efectos de la crisis migratoria en Centroamérica: migrar no es un delito

"Su proyecto de ley adicional también debería aumentar la protección de los niños inmigrantes, incluidas normas más estrictas y el control de las instalaciones fronterizas. Es posible y necesario cuidar de la seguridad de los niños inmigrantes y de la seguridad de nuestros ciudadanos. Dejando a un lado los intereses partidistas. Una nación tan grande como la nuestra - concluye la nota - es capaz de hacer ambas cosas".