El cardenal Omella lamenta la tensión política en España: " "Me duele mucho la imagen de crispación que damos"

El presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal y Arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, ha lamentado el alto grado de crispación que ha alcanzado la política española en estos meses marcados por la crisis económica, social y sobre todo sanitaria que ha dejado la pandemia del COVID-19. Una tensión que, hasta el momento, está impidiendo que se lleven a cabo acuerdos políticos: "Me duele mucho esa imagen que damos de crispación y enfrentamiento. Parece que la gente está deseando que se peguen entre ellos porque da conversación, y a los periodistas parece que también les gusta porque a veces hablan más de los conflictos que de la realidad. Potenciemos el diálogo", ha pedido Omella.

El presidente del organismo episcopal, que ha participado este miércoles en un coloquio online organizado por la Fundación Pablo VI junto al vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos, para abordar el mundo tras el COVID-19, remarca la importancia de crear espacios comunes donde debatir de manera sosegada: "Los políticos tienen que pactar, pero no solo ellos, se tienen que abrir a todas las iniciativas privadas y sociales para dialogar todos. A todos nos preocupa el bien común por encima de la ideología. Es el único camino y para ello tenemos que poner mesas en las calles para sentarnos todos".

A juicio del presidente de la CEE, "necesitamos líderes sociales y políticos coherentes que hagan lo que dicen y estén enraizados en esta realidad de sufrimiento. Hay cosas que duelen, como que los políticos se suban el sueldo en plena crisis. En la Iglesia los sacerdotes y obispos se lo han bajado para ayudar a los pobres. La Iglesia siempre juega no a dividir, sino a sembrar la paz y unir a la gente. Ese es nuestro papel, y no echar más leña al fuego. Trabajar juntos por avanzar en mayor solidaridad. Por eso hablo tanto del pacto social o educativo”, subraya el cardenal Juan José Omella.