Fallece Antonio Rodríguez, el sacerdote que sobrevivió al atentado en una iglesia de Algeciras

El sacerdote salesiano Antonio Rodríguez Lucena, uno de los heridos que sobrevivió al atentado yihadista ocurrido en Algeciras el pasado 25 de enero, ha fallecido este lunes a los 75 años en la localidad gaditana tras una larga enfermedad.

Así lo ha dado a conocer al ayuntamiento de Algeciras en un comunicado elaborado por la Casa Salesiana y en el que el alcalde, José Ignacio Landaluce, ha expresado el pesar de la corporación municipal por esta pérdida.

Asimismo, el director de los Salesianos de Algeciras ha querido mostrar "el mayor agradecimiento de toda la Comunidad Salesiana por vuestras atenciones, cuidados, buenas palabras y deseos con D. Antonio. Justo antes de su fallecimiento estábamos organizando los turnos para acompañarlo en el hospital. Estos meses han estado plagados de detalles, oraciones, palabras de ánimo que él agradeció en todo momento. Tantos y tantos amigos y amigas, familias, antiguos alumnos han llenado su corazón de amor y de miles de gestos de amistad y cariño. Gracias también a las instituciones que también se han preocupado por su evolución y, especialmente, gracias al obispo por su cercanía y oración, así como a los salesianos y el Inspector".

El fallecimiento, consecuencia de una larga enfermedad

Antonio Rodríguez Lucena era el vicario parroquial de San Isidro, la capilla donde oficiaba la misa la tarde del 25 de enero, cuando se produjo el ataque a varias iglesias de la localidad por parte de Yassine Kanja, un suceso que dejó cuatro heridos y el asesinato del sacristán de la iglesia de Nuestra Señora de la Palma, Diego Valencia.

El sacerdote logró recuperarse de las heridas de aquel ataque y su fallecimiento, que ha tenido lugar en el Hospital Universitario Punta de Europa de Algeciras, es consecuencia de una larga enfermedad, según el comunicado.

El funeral, este miércoles en la parroquia de María Auxiliadora y San Isidro

La Casa Salesiana de Algeciras ha explicado en sus redes sociales que el sacerdote llevaba luchando desde el mes de abril contra un cáncer que le había afectado al páncreas y al hígado.

La capilla ardiente será instalada este martes en la parroquia de María Auxiliadora y San Isidro, donde se celebrará el funeral este miércoles.