Granada celebra este sábado la beatificación de Conchita Barrecheguren: "Modelo de santidad para todos"
En el marco de esta beatificación, este viernes, 5 de mayo, tendrá lugar una vigilia de oración, a las 20:30 horas, en el santuario de Santa María del Perpetuo Socorro
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La Iglesia en Granada vivirá este sábado, a las 11h de la mañana en la Catedral, y en directo en TRECE, un día muy emocionante con la beatificación de Conchita Barrecheguren, la joven que murió en 1927, enferma de tuberculosis, cuando tenía solamente 22 años. El milagro que le aprobó el Papa para poder ser considerada beata tuvo lugar en 2014, cuando intercedió en la curación de una niña de Alicante de 16 meses. El bebé tuvo un fallo multiorgánico y los médicos decían que no podían hacer nada más por ella.
Aquí es donde aparecen Emilia y Jovita, dos hermanas de Alicante que siempre habían sido muy devotas de Conchita y que recibieron una llamada de la tía de la bebé, que les pidió que rezarán por ella. La conocían porque era la persona que limpiaba en su casa y le dijeron que para que Conchita intercediese, tenían que ponerle en la habitación del hospital una medalla de la nueva beata. Los médicos seguían sin tener ningún tipo de esperanza por la curación del bebé, pero al octavo día de rezo comenzó a obrarse el milagro: el bebé abrió los ojos.
Emilia, Jovita y más de 2.500 personas van a estar este sábado en la beatificación en Granada de Conchita Barrecheguren, como se llamaba esta joven de Granada que ya era considerada “venerable” por la Santa Sede desde el año 2020.
“La persona de Conchita Barrecheguren, con sus 21 años, es una referencia de vida cristiana y santa adecuada especialmente para los jóvenes de hoy. De ella y de su juventud, se puede destacar su capacidad para vivir con los pies en la tierra, sin eludir la realidad de su momento histórico y abierta al deseo del Cielo”, recordó el arzobispo de Granada, José María Gil Tamayo.
“Es mujer de su tiempo, sin añoranzas desfasadas de un ayer que no vivió; sin conformismo resignado con un presente que busca imponerse; y distanciándose, hábilmente y con libertad asombrosa, de supuestos avances que le parecen distracciones de aquello que había descubierto como esencial para su vida”, subrayó en su última carta pastoral.
Para el arzobispo, la beatificación de Conchita Barrecheguren tiene principalmente tres rasgos: “Su vida familiar, que genera un espacio de crecimiento humano y cristiano donde brotan los frutos del Evangelio. Su juventud, vivida desde la fe en Jesucristo y que le lleva a descubrir su vocación como identificación con la voluntad de Dios. Su enfermedad, que le ayuda a interpretar la fragilidad de la vida humana y a ofrecerla a Dios junto con el Señor Jesús en la Cruz y la Eucaristía”.
En el marco de esta beatificación, este viernes, 5 de mayo, tendrá lugar una vigilia de oración, a las 20:30 horas, en el santuario de Santa María del Perpetuo Socorro. Asimismo, al día siguiente de la beatificación, el domingo 7 de mayo, el santuario acogerá la misa de acción de gracias a Dios a las 12 horas, con la comunidad de padres redentoristas y devotos de Conchita y la familia Barrecheguren, así como fieles en general que deseen sumarse.