Descubrir qué quiere Dios de ti: "Sigue llamando pero hay falta de respuesta”
La Iglesia celebra la Jornada Mundial de Oración para las vocaciones y las Jornadas de las Vocaciones Nativas el próximo domingo 21 de abril. "Cultivar la vida como vocación"
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El próximo Domingo 21 de abril, cuarto domingo de pascua y domingo del Buen Pastor, la Iglesia celebra la Jornada Mundial de Oración para las vocaciones y las Jornadas de las Vocaciones Nativas. Aunque ambas jornadas se celebran el mismo día, cada jornada tiene sus objetivos. La primera, la Jornada Mundial de Oración para las Vocaciones, tiene como reto animar a los jóvenes a interrogarse sobre cuál es su verdadera vocación, qué quiere Dios de cada uno de nosotros. Además, es un día que invita a la comunidad cristiana a rezar y acompañar a todas estas vocaciones.
Por otro lado, las Jornadas Nativas, lo que animan es a rezar por aquellas vocaciones que surgen entre los jóvenes al sacerdocio y a la vida consagrada en los territorios de misión. Además, a través de estas jornadas, también se reza por mantener estas vocaciones y sostenerlas, para que así ninguna quede frustrada por desarrollarse en lugares en los que no haya recursos.
"¿Qué quiere el Señor de nosotros?”
Hoy ha tenido lugar la presentación de estas Jornadas en la Conferencia Episcopal Española. Además, intervienen en estas jornadas y las convocan la Conferencia Episcopal Española (CEE), la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), Obras Misionales Pontificias (OMP) y Conferencia Española de Institutos Seculares (CEDIS).
Entre las intervenciones que han tenido lugar hemos podido escuchar a Luis Manuel Romero, coordinador del Servicio de Pastoral Vocacional de la CEE; Nicéforo Obama Eyene, sacerdote diocesano de Ebibeyín (Guinea Ecuatorial); Ana Cristina Ocaña, laica consagrada de CEDIS; y Daniel Díaz-Rincón, responsable del sector de jóvenes de ACG.
Luis Manuel Romero apuntaba que hay que hacer consciente a todo el mundo que todos tenemos una vocación. La pregunta fundamental que surge aquí es, ¿Cómo podemos transmitir este mensaje a los más jóvenes?. Los jóvenes son el futuro de la Iglesia y a los que se dirigen estas jornadas. Además, añadía Luis Manuel que es muy importante “cultivar la vida como vocación y a partir de ahí preguntarnos, ¿Qué quiere el Señor de nosotros?”.
Por último, es importante señalar que “Dios sigue llamando, lo que ocurre es que existe falta de respuesta”. Las vocaciones son diferentes pero todas son complementarias. Además, el coordinador del Servicio de Pastoral Vocacional de la CEE, también ha anunciado que el próximo Congreso Nacional sobre las vocaciones tendrá lugar entre los días 7 y 9 de febrero del próximo 2025.
La vocación que nació en Nicéforo, sacerdote proveniente de Guinea Ecuatorial
Nicéforo Obama Eyene, sacerdote diocesano de Ebibeyín (Guinea Ecuatorial) nos ha contado que conoció la Iglesia en su país de origen desde muy pequeño. Las hermanas carmelitas de la Caridad, fundada por Santa Joaquina de Vedruna, se instalaron en la zona en la que él residía.
Poco a poco, Nicéforo se fue dando cuenta de la labor que realizaban estas hermanas con sus compatriotas. La labor no se reducía solamente a la esfera espiritual, también abordaban sanidad, educación, proporción de alimentos a los que lo necesitaran... Nicéforo apunta que fueron ellas las que lo enseñaron a leer y a escribir y se preguntaba, ¿Por qué han venido estas hermanas desde España para ayudarnos a nosotros? Fue ahí cuando entendió que seguir a Jesús es lo que le daba sentido a la vida de estas hermanas y también a la suya propia, sintiendo así la llamada de la vocación al sacerdocio. También ha añadido que muchas familias no poseen los suficientes recursos para sostener una vocación de así, y eso es lo que hace la Iglesia.
El eslabón que existe entre el mundo y la Iglesia
Daniel Díaz-Rincón, quien es el responsable de los jóvenes de Acción Católica General, nos ha hablado de su vocación laical. Se define a sí mismo como “un discípulo misionero en el lugar en el que esté” y ha recalcado la importancia de hacer llegar a los jóvenes que Dios tiene una vocación para cada uno de nosotros.
Por último, ha intervenido Ana Cristina Ocaña, laica consagrada perteneciente al instituto secular Servi Trinitatis. Ana Cristina ha apuntando que ella se considera al 100% consagrada y al mismo tiempo, 100% laica. Apunta que ambas realidades son compatibles y que una realidad no le resta importancia a la otra. Es por ello que su labor fundamental es llevar el Evangelio a aquellos lugares y rincones a los que la Iglesia no llega. Además, Ana Cristina ha apuntado que su vida está entregada a Cristo con los correspondientes votos de castidad, pobreza y obediencia y que se considera el eslabón que existe entre el mundo y la Iglesia.