Juan Antonio Martínez Camino, sobre Benedicto XVI: "Fue providencial para la Iglesia del siglo XX"
El obispo auxiliar de Madrid ha dirigido un curso de La Granda dedicado a Benedicto XVI, dentro del seminario titulado "Grandes personalidades del siglo X"
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
El obispo auxiliar de Madrid, Juan Antonio Martínez Camino, ha declarado este miércoles en la Escuela de Verano de La Granda que el Papa Benedicto XVI ha contribuido de forma importante a “abrir caminos de la evangelización para la modernidad”.
Juan Antonio Martínez Camino ha dirigido un curso de La Granda dedicado a Benedicto XVI, dentro del seminario titulado “Grandes personalidades del siglo XXI”, con la participación de expertos en la figura del pontífice, como el cardenal arzobispo emérito de Madrid, Antonio María Rouco Varela.
Para el obispo auxiliar de Madrid, Benedicto XVI “ha sido un hombre providencial para la Iglesia del siglo XX” y, de hecho, ha aseverado que se puede asemejar “a aquello padres de la Iglesia de los primeros ocho siglos que fueron capaces de introducir" el evangelio en la cultura grecolatina”.
"Contribuyó a abrir caminos de la evangelización para la modernidad"
Además, el papa Ratzinger ha contribuido de forma importante a la "inculturación" del evangelio en la cultura moderna, “a abrir caminos de la evangelización para la modernidad”, ha aseverado en declaraciones a EFE. “Es cierto que, a veces, la imagen que se ha dado de él no sea ésa, pero esa es la realidad, ya que ha contribuido como pocos a que el Concilio Vaticano II profundizara en el concepto de revelación en el sentido personal e histórico”, ha explicado el obispo.
Esa contribución “es una apelación a la libertad” y de ello se derivan muchas consecuencias de las que se ha hablado durante el seminario dedicado al pontífice fallecido el pasado 31 de diciembre de 2022 en Ciudad del Vaticano.
Sobre la opinión extendida de una figura conservadora, frente a Francisco, más aperturista y progresista, Martínez Camino ha dicho que “esas comparaciones inmediatas” obedecen más a “las necesidades y la inmediatez de la información, y a que hay que poner un poco de pimienta y de sal en las cosas”.
Benedicto XVI, ya en 1961, escribió para el cardenal Josef Frings una conferencia en Génova en la que dijo que el Concilio del Vaticano II debería de buscar la inculturación del evangelio en la época moderna, con sus rasgos actuales, en cuanto a que la esperanza que necesitan “los individuos, todas las clases sociales y la Tierra, la humanidad”.
“Éstos son los anhelos más o menos expresados en las ideologías marxistas y socialistas”, ha indicado el obispo auxiliar de Madrid, que también se ha referido a otro rasgo de la modernidad al que aludió entonces Ratzinger, como es “el respeto al otro y a la libertad de conciencia, que es lo típico de las ideologías que se pueden poner bajo el paraguas del liberalismo”.
“En las dos cosas hay algo bueno y el evangelio tiene que responder a ello y tenemos que expresarlas en los términos del evangelio, no en los de los de ideologías ateas que acaban perjudicando al hombre y a la vida humana”, ha comentado, en alusión al análisis que hacía el pontífice en 1961.