Mártires que murieron rezando o abrazando a su verdugo: los testimonios en el foro sobre el Perdón
La Oficina de la Causa de los Santos de la CEE ha celebrado el foro 'El Perdón y la Reconciliación' basándose en el testimonio de los mártires perseguidos en el siglo XX en España
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El perdón y la reconciliación son dos claves para vivir la Semana Santa. La providencia ha querido que, en la víspera de la semana más importante del Año Litúrgico, se haya celebrado el pasado 12 de marzo el Foro sobre el Perdón y la Reconciliación'. Un encuentro organizado por el Instituto de Espiritualidad de la Universidad Pontificia Comillas en colaboración con la Oficina de la Causa de los Santos de la Conferencia Episcopal Española.
“El perdón es para todo el año, y desde hace tiempo estamos pensando en cómo llevar a la sociedad civil esta realidad que nos enseñan los mártires y tantas personas que ofrecen su vida por amor a Dios”, ha explicado en 'ECCLESIA al día' la directora de la Oficina de la Causa de los Santos del episcopado, Lourdes Grosso.
En este foro se ha tomado como referencia la publicación '609 mártires del siglo XX en España beatificados entre 2010 y 2022. Quiénes son y de dónde vienen' publicado por la editorial EDICE, que es el cuarto volumen de una serie que se está publicando sobre los mártires de la persecución religiosa del siglo XX en España.
Grosso ha precisado que en total ya han sido beatificados 2117 mártires de aquella etapa oscura de nuestra historia, mientras que once son ya santos. En cuanto a las causas abiertas actualmente, la cifra se eleva a 3.280: “Son mártires que mueren dando la vida por Cristo porque perdonan, a veces explícitamente”.
Lourdes Grosso: “Estamos llamados a perdonar”
Durante el foro se conocieron historias del perdón de estos mártires, como la de un anciano que preguntó, antes de ser ejecutado en la Guerra Civil Española por las milicias, quien iba a dispararle: “Le contestaron qué le importaba a él, pero quería saberlo para darle un abrazo de perdón”, ha contado Lourdes Grosso.
Y es que durante el Foro sobre el Perdón y la Reconciliación' se pretendía transmitir el mensaje de que todos “estamos llamados a perdonar, porque la vida del cristiano es amor y perdón”, ha señalado la directora de la Causa de los Santos de la CEE.
“Estas biografías son modélicas porque son gente contemporánea, conocemos sus rostros, sus familiares, sus pueblos, son personas normales que recibieron la fuerza del amor de Dios para perdonar a los hermanos en el momento más dramático de la vida y el más glorioso”, ha puntualizado.
Fernando del Moral: “Tenemos un proceso abierto de un joven de quince años ”
Por su parte el adjunto a la dirección de la Causa de los Santos, Fernando del Moral, ha recalcado que la persecución religiosa en España dio comienzo el 11 de mayo de 1931 (un mes más tarde de la instauración de la Segunda República), aunque se recrudeció durante la revolución de Asturias en 1934 y se extiende hasta 1937 y 1938, en el contexto de la Guerra Civil Española.
En este sentido, del Moral subraya que el objeto del maritrio “es que mueren por la fe, no por ideas políticas”, siendo este el motivo por el que la mayor parte de los mártires beatificados “pertenecen a familias religiosas o sacerdotes”.
Asimismo, el sacerdote ha matizado que probar el motivo de la muerte de los mártires es un proceso que se puede prolongar durante años: “Hay que probar que el motivo es el odio a la fe y no una afiliación política. Algunos mueren por su vinculación a la Iglesia, mujeres que cuidaban a sacerdotes o perenecer a asociaciones religiosas”.
Fernando del Moral también ha puntualizado que entre las causas abiertas 700 son laicos, y algunos en edad adolescente: “Tenemos un proceso abierto de un joven de quince años en Toledo. Es un chaval que muere porque no quiere blasfermar y le dicen que tendría un futuro prometedor si blasfema”, ha contado.
Otro testimonio que se expuso en el foro 'Perdón y Reconciliación' es el de Sor Martina, Hija de la Caridad que fue beatificada y que fue ejecutada por un joven que ella misma había acogido cuando quedó huérfano siendo bebé: “Le había hospedado, le dio un oficio y el joven es engañado para acabar matándola. En el último diálogo ella le pide que sea valiente, pero le pregunta si tanto bien que le ha hecho se lo paga así”.
Tal y como relató la vicepostuladora de la causa de Sor Martina, una vez concluida la guerra su verdugo pidió perdón delante del pueblo y le pide la absolución al obispo: “El odio consume odio, y el perdón, quizás con el tiempo, genera una cultura de perdón”, ha sostenido el director adjunto de la Causa de los Santos del episcopado.