El Papa concede la Cruz Pro Ecclesia et Pontifice a la directora general del Instituto Secular Cruzadas de Santa María

Lydia Jiménez ha sido condecorada con una de las máximas distinciones que puede recibir un católico

UCAV

Lydia Jiménez, directora general del Instituto Secular Cruzadas de Santa María

Redacción Religión

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Lydia Jiménez, directora general del Instituto Secular Cruzadas de Santa María y presidenta del Consejo Directivo de la Universidad Católica de Ávila (UCAV), ha recibido la Cruz Pro Ecclesia et Pontifice. Esta condecoración papal es una de las máximas distinciones que puede recibir un católico.

La abulense ha recibido esta insignia en Roma de manos del Papa Francisco. Con ella, se reconoce su trayectoria en las Cruzadas de Santa María, una actividad en la institución secular que comenzó en 1965 y que, con el tiempo, le ha servido para iniciar y asentar diferentes proyectos educativos y pastorales. Precisamente, estos proyectos llevados a cabo por Lydia Jiménez pueden apreciarse en doce países, repartidos por África, América y Europa. Además, se espera la cercana apertura de una nueva fundación en Filipinas.

El buen hacer de la abulense ha sido reconocida por el Vaticano desde hace décadas. Primero Juan Pablo II y después Benedicto XVI ya apreciaron en ella a una gran colaboradora de la Iglesia. Ahora, el Papa Francisco le hace entrega de esta insignia de honor, la cual Lydia Jiménez ha agradecido, aunque nunca pensó que fuera a ser merecedora de ella, como ha comentado.

Una condecoración extraordinaria

La Cruz Pro Ecclesia et Pontifice se trata de una importante distinción papal. Fue instituida por León XIII en 1888 y es concedida por el sumo pontífice para reconocer un largo y excepcional servicio a la Iglesia católica o al Papa. Se trata de una medalla con una cruz que representa el escudo de la Santa Sede y cuya cinta cuenta con los colores amarillo y blanco del Vaticano.