El posible paradero de los dos cuadros de Zurbarán desaparecidos durante la Guerra Civil en Alcalá de Henares

Dos cuadros de Zurbarán, uno de los pintores más reconocidos de nuestra historia, desaparecieron con el estallido de la guerra. ¿Han aparecido?

El posible paradero de los dos cuadros de Zurbarán desaparecidos durante la Guerra Civil en Alcalá de Henares

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

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Francisco de Zurbarán es uno de los máximos representantes del Siglo de Oro español. La pintura religiosa fue sin duda su principal legado. El misticismo y la fuera visual de sus cuadros son sus principales sellos. Nació en la provincia de Badajoz y falleció en Madrid en 1664, aunque sus años dorados los disfrutó la ciudad de Sevilla.

Ya en sus últimos años de vida, se afincó en Madrid, siendo el lugar donde pintó sus últimos cuadros. Entre ellos se encuentran el cuadro sobre San Agustín y otro sobre Santo Tomás de Villanueva, que fueron pintados en torno a 1660. Ambas expresiones artísticas se realizarían para la iglesia del Convento de Agustinas de Santa María Magdalena de Alcalá de Henares, también conocida como Nuestra Señora de la Consolación.

En el primero de los cuadros, el protagonista es San Agustín, patrón de la orden a la que pertenece el convento. Como se puede observar, San Agustín aparece representado con una pluma en la mano derecha, mientras que en la izquierda lleva consigo un edificio, que podría simbolizar 'la Ciudad de Dios'.

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Por su parte, Santo Tomás de Villanueva aparece con el hábito agustino, mitra episcopal y dando limosna a quien lo necesita. Ambas obras se encontraban en la iglesia del convento, en el retablo mayor.

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Así fue hasta que en 1936 estalla la Guerra Civil Española, que trajo para la cultura de Alcalá dde Henares nefastas consencuencias, al producirse el saqueo de gran cantidad de obras y cuadros. El convento de Agustinas de Santa Maria Magdalena fue una de las más afectadas.

Poco o nada se volvió a saber de aquellas obras. Sin embargo, de estas dos de Francisco de Zurbarán, sí. Una vez estalló el conflicto bélico, ambas obras pasaron a formar parte de una colección privada. Fue desde que en 1936 se hiciera con ellas Joaquín Chapaprieta, un abogado y político español que en el inicio de la Guerra Civil era presidente del Consejo de Ministros de la Segunda República.

En la actualidad, por lo que se ha podido saber, el cuadro de Santo Tomás de Villanueva está en la colección Várez Fisa, mientras que la que representa a San Agustín se desconoce su paradero. ¿Volverán algún día a su lugar de origen?