Teología, idiomas o exámenes orales: el duro programa de estudios que reciben los seminaristas
Tras siete años de estudios en el seminario ymun periodo de prácticas en la parroquia, el consejo episcopal asigna el destino de cada uno de ellos
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Filosofía, Teología o Historia. Son algunas de las asignaturas que un seminarista tiene que estudiar antes de ser ordenado sacerdote. Es el caso de Diego Gutiérrez, que tras siete años en el Seminario Mayor de Toledo, recibirá el sacramento de la ordenación el mes que viene.
En 'Ecclesia al día', el todavía diácono ha precisado que en el Seminario de Toledo están siete años de preparación, el primero de ello a nivel introductorio.
“En el Seminario Mayor de Toledo estamos siete años de formación, primero con el curso propedéutico, que es como una introducción al Seminario y a los estudios filosóficos y teologicos, en los que uno se introduce en la vida del seminario, en la convivencia, en la pastoral y en el estudio, porque algunos compañeros vienen incluso de la vida laboral y hace muchos años que no estudian”, ha explicado el seminarista.
Filosofía, Teología, idiomas y oratoria
Una vez superado este curso de introducción, se profundiza durante dos cursos en Filosofía, concretamente en aquellas materias que la Santa Sede establece como obligatorias: “A continuación serían cuatro años de estudios teológicos, donde al final hacemos el examen de tesis para obtener el título en Bachilleres en Teología”, ha recalcado Diego Gutiérrez.
En el ámbito teológico, los seminaristas profundizan en aspectos como el estudio de los Santos Padres, las Sagradas Escrituras o las cartas apostólicas: “Se dedica mucho tiempo al estudio de los Sacramentos, cada uno tiene una asignatura, además de la moral de la persona o la vida. La historia d ella Iglesia también cuenta con varias asignaturas”, ha señalado.
No solo Teología y Filosofía, también se les exige a los seminaristas un nivel B1 en algún idioma moderno como el inglés, francés o italiano, así como musical.
También se hace hincapié en la formación de oratoria para dirigirse al público, que es un aspecto fundamental en los sacerdotes: “En los exámenes finales nos obligan en como mínimo dos asignaturas a hacerlo oral. Coges la papeleta y el tema que te toca lo tienes que exponer delante de los profesores”.
Así son las prácticas de los seminaristas antes de ser ordenados sacerdotes
Ya en la etapa final dela formación, los futuros sacerdotes tienen un periodo de prácticas pastorales. En el caso de Diego, en este último curso acude desde los viernes por la tarde hasta el domingo a una parroquia previamente asignada de la diócesis de Toledo “para ayudar al párroco, como administrando sacramentos, predicar, llevar a grupos de jóvenes... Y el verano en el que recibimos la ordenación de diácono estamos un mes en la parroquia”, ha detallado.
Una vez ordenados sacerdotes, el destino lo decide el consejo episcopal con el arzobispo al frente: “Algunos pueden ir directamente como párrocos y otros vicarios parroquiales en los pueblos”.
Diego, que pronto conocerá su destino, asegura no estar nervioso, ya que asume que “cuando uno entra en el seminario viene a entregarla la vida al Señor y confiar en Él. Estamos dispuestos a ir donde se nos mande”, asegura.