Vecinos de Alcorcón claman contra PSOE y Podemos por arrebatar el local a su hermandad: "Por ser cristianos"
Algunos vecinos y hermanos de la cofradía han entregado a la alcaldesa las 21.000 firmas recogidas para dar marcha atrás a la medida
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Vecinos de Alcorcón han acudido este martes al Ayuntamiento para entregar las más de 21.000 firmas recogidas en las que demandan al Equipo de Gobierno del municipio madrileño, gobernado por la socialista Natalia de Andrés con el apoyo de Ganemos Alcorcón (Podemos) que no cambie de lugar a los más de 300 hermanos que integran la Hermandad y Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Esperanza de Alcorcón.
Y es que que el Gobierno Municipal decidió hace unas semanas, de manera unilateral y sin previo aviso, romper con el contrato de cesión del local donde la hermandad desempeñaba sus labores religiosas y solidarias, como la recogida de alimentos, organizar cineforums o dar clases particulares a los jóvenes.
Algunos de los manifestantes portaban pancartas en las que clamaban contra una decisión que para muchos es un ataque a la fe y a la libertad religiosa. Por ello, se podían leer mensajes como "Stop Desahucio", "No al cierre de la casa de hermandad" o "La alcaldesa socialista nos expulsa por ser cristianos".
La decisión de la alcaldesa no fue notificada
El contrato, firmado hace un año por el anterior Equipo de Gobierno del PP, recogía que la hermandad podía hacer uso del local por un periodo de veinte años. Son muchos los colectivos del municipio quienes consideran que detrás de esta decisión de la alcaldesa, la socialista Natalia de Andrés, se esconde un intento por atacar la fe de los devotos de la cofradía, motivado por tintes políticos e ideológicos.
La hermandad, a través de un comunicado, aseguró que no habían recibido ningún tipo de notificación por parte del Equipo de Gobierno ni la concejalía que comete la cesión de locales municipales. Según el mismo comunicado de la Hermandad y Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Esperanza, aún no se les había ofrecido un espacio alternativo donde poder seguir desempeñando su valiosa labor en la sociedad alcorconera.
El Equipo de Gobierno pretende destinar el local que hasta ahora ocupaba la hermandad como cantón de la Empresa de Servicios Municipales (ESMASA), con el objetivo de propiciar la organización de los servicios de limpieza en la zona centro de Alcorcón.
La propia regidora explicó que era necesario este cambio, bajo el pretexto de que hasta ahora ESMASA se encontraba en un local demasiado pequeño y antiguo, y añadía que la cláusula del convenio recogía la posibilidad de finalizar el contrato de cesión en función de las necesidades públicas. La primera edil socialista además afirmó que buscarán una nueva ubicación para la hermandad.