Dos amigos recorren el Camino de Santiago para pedir una ley de prevención del suicidio: "Muchos no saben dónde apoyarse"

Los abulenses Miguel Leralta y Javier González Jara, que es ciego, están recorriendo el Camino de Santiago con un objetivo claro: solicitar la creación de una ley de prevención contra el suicidio. Ambos amigos han recorrido ya 424 kilómetros y a día de hoy se encuentran en León, a menos de la mitad de completar su travesía. El proyecto solidario, que han bautizado como 'Hablemos en el Camino', ha contado con el apoyo de personalidades como Iker Casillas, Carlos Sastre y la periodista Ana Samboal.

La idea del reto surgió, según ha explicado Miguel en el programa 'Ecclesia al día', “a través de una conversación de dos amigos. Javier tenía muchas ganas de hacer el Camino de Santiago y supone un sacrificio personal, familiar, emocional... La manera de hacer esto era que fuera por un proyecto solidario y decidimos que fuese por la prevención del suicidio”.

"la importancia de tener un plan de prevención nacional"

En esta línea, Javier ha añadido que “como se dice siempre en el ámbito de la salud, 'más vale prevenir, ¿no?'. Y para que haya esa prevención, tienen que existir unas normas en las que basarnos para que realmente se pueda bajar esa gran cantidad de personas que no saben dónde apoyarse”.

Esta iniciativa busca concienciar sobre la importancia de tener un plan de prevención nacional y la necesidad de hablar sobre el tema sin tabúes: “Todos en algún momento de nuestra vida tenemos algún bajón”.

En su camino, ambos han recibido apoyo de todo tipo. Según Miguel, “ayer, sin ir más lejos, estuvimos compartiendo cena en un albergue maravilloso con personas australianas que nos compraron la camiseta y apoyaron la iniciativa con aportaciones económicas. Son momentos especiales que hacen que todo el esfuerzo valga la pena”.

"No queremos que acabe hasta que se implanten medidas"

Pese a las dificultades físicas del reto, Javier destaca la importancia de apoyarse mutuamente. “Yo tengo grandes amigos, como Miguel, familia... Nos tenemos que apoyar unos a otros porque las personas estamos para eso”.

Ambos amigos esperan que su llegada a Santiago de Compostela sea un “momento ilusionante”, pero no quieren que todo termine allí: “No queremos que acabe hasta que no veamos realmente que este país, que este gobierno, empiece a plantar medidas”. El reto de "Hablemos en el Camino" seguirá hasta que logren su objetivo: un plan nacional que ayude a prevenir el suicidio y brindar apoyo a quien más lo necesitan.