El grito de dolor del padre Hugo en Alepo en este día de Navidad: "Ahora estamos peor que hace dos años"

Siria agoniza. Siria sufre las consecuencias desde hace ya más de 11 años de una guerra olvidada que ha dejado al 90% de la población en situación de auténtica pobreza. La comunidad cristiana, tremendamente afectada, disminuye a pasos agigantados. La Iglesia allí pide auxilio para socorrer a las familias cristianas que aún permanecen y evitar, así, que tengan que abandonar su tierra para siempre. Son el presente y el futuro del Cristianismo en Siria.

Por eso Ayuda a la Iglesia Necesitada dedica su gran campaña a este país y en COPE, este domingo 25 de diciembre, se ha querido dedicar un programa, 'AIN por Siria', a esta campaña. Un programa dirigido por Raquel Martín que ha escuchado las voces de quienes están ayudando y de quienes son ayudados.

El Padre Hugo Alaniz, sacerdote y misionero argentino del Instituto del Verbo Encarnado, que atiende la parroquia de la Asunción, en Alepo, ha sido uno de los protagonistas de este programa. Muy cerca de Homs hay un valle precioso donde 29 ciudades pequeñas aglutinan la mayor presencia cristiana de toda Siria. Todas las familias que huyeron de las grandes ciudades con los bombardeos, la mayoría se fueron allí a refugiarse en los años más duros de la contienda.

¿Qué ambiente hay en este 25 de diciembre en su ciudad?: “Me gustaría ser positivo sabiendo que Dios está con nosotros, eso sin duda es un mensaje de esperanza y más grande no puede haber, pero la situación aquí es muy triste”, ha lamentado el Padre Hugo.

“Yo creo que todo el mundo tiene muy presente las imágenes de esta guerra en Ucrania, lo que es la destrucción, las familias que de un momento tienen que dejar todo. No solamente cambiar de casa, es dejar su historia. Es lo que ha pasado aquí hace 12 años y sigue pasando: gente que económicamente no pueden salir adelante y aun así el mensaje de esperanza lo llevan fuerte, sobre todo en esta fiesta de Navidad”, ha afirmado el misionero argentino.

El sacerdote del Instituto del Verbo Encarnado ha explicado a COPE que la situación en el país es realmente muy dramática: “No hay combustible, no hay electricidad permanente, es muy triste la situación por lo que la gente, las familias y los ancianos están pasando. Se han decretado ahora tres días festivos, justamente porque no hay combustible ni medios de transporte”.

Aun así, espiritualmente la gente es muy fuerte: “La gente de aquí, y yo lo dijo siempre, es un ejemplo para nosotros y cómo viven la religión cristiana y están arraigados a esta fe. Es justamente esto los que los mantienen en pie: es la fe”. “Todos concuerdan que en el momento de la guerra estábamos mejor que ahora”, ha dicho Padre Hugo.

El sacerdote argentino ha recordado además que gracias a las ayudas que llegan han podido construir un comedor y una cocina comunitaria: “Hay gente que viene a comer aquí todos los días y también llevamos la comida a la gente que está sola o no pueden salir de sus casas. La llevamos con los voluntarios, tres veces a la semana. Lo hacemos tres veces para economizar el combustible”.

Por último, el Padre Hugo ha pedido oraciones para todo el pueblo sirio: “Sus oraciones tienen más fuerza que las bombas. A través de la oración pidan para que termine este bloqueo económico impuesto de los países del primer mundo a Siria: es eso lo que perjudica la vida aquí”.