Nuevo ataque del terrorismo a la Iglesia de Nigeria: Dos misioneros claretianos son secuestrados
Los dos misioneros, pertenecientes a los Hijos del Inmaculado Corazón de María, fueron secuestrados el pasado 1 de febrero: se tratan del Padre Ken Kanwa y su asistente
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Máxima preocupación nuevamente en la Iglesia de Nigeria, donde dos misioneros claretianos, pertenecientes a los Hijos del Inmaculado Corazón de María, fueron secuestrados la noche del 1 de febrero en el Estado de Plateau, en el centro del estado africano, por unos hombres armados. Se trata del Padre Ken Kanwa, párroco de la iglesia de San Vicente de Paúl Fier en el estado de Plateau, y de su asistente el Padre Jude Nwachukwu.
Desde hace algún tiempo, la lacra del secuestro con fines de extorsión se ha convertido en un problema endémico en toda Nigeria. Sacerdotes y religiosos son secuestrados, al igual que muchos otros ciudadanos de a pie.
Según informaciones aparecidas en la prensa nigeriana entre julio de 2022 y junio del año pasado, 3.620 personas fueron secuestradas en 582 casos de secuestro. Se calcula que en total se pidieron al menos 5.000 millones de nairas en rescates, de los cuales se pagaron realmente al menos 302 millones de nairas. Sin embargo, esta cifra puede ser mayor porque no todos los secuestros se denunciaron a las autoridades.
Un fenómeno delictivo que cuenta con la complicidad a alto nivel de los bancos a través de los cuales se pagan la mayoría de los rescates. Como informa un artículo de The Nation, en Nigeria hay 133 millones de titulares de cuentas bancarias, de las cuales cinco millones son falsas.
Los bancos utilizan documentos de identidad robados de personas fallecidas para abrir cuentas que son utilizadas por los secuestradores para recibir el pago de los rescates.
Cabe recordar que la campaña de Navidad de Ayuda a la Iglesia Necesitada puso la mirada en Nigeria, con un lema verdaderamente preciso: 'Iglesia mártir, Iglesia viva'. Y es que, ciertamente, la Iglesia en Nigeria está viva y en muchos aspectos es pujante: por la fuerza de su testimonio evangélico, por su relevancia social, por su libertad con que habla a los poderosos, por su red de servicio a los más pobres… y aunque quizás no sea lo más importante, por sus números. Uno de ellos: en Nigeria se forman 5.000 seminaristas, el mayor número en todos los países de África, pese a que en muchas regiones de ese país, serlo significa estar en la diana de los terroristas.