El obispo de Nacala lamenta en COPE el atentado de Mozambique: "Estamos afligidos por esta situación”
El titular de la diócesis de Nacala, el español Alberto Vera, ha informado que los sacerdotes y religiosas que huyeron de Chipene se dirigen hacia el obispado
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El obispo de Nacala, el español Alberto Vera, ha mostrado en COPE su conmoción por el ataque terrorista que ha tenido lugar en la casa de las Hermanas Combonianas en Chipene, perteneciente a su diócesis, que ha costado la vida a la religiosa italiana Maria De Coppi. Entre las misioneras se encontraba la española Ángeles López Hernández, que logró escapar junto a otra religiosa y un grupo de niñas.
Los terroristas, aún no hay confirmación de su procedencia islámica, asaltaron en la tarde de este martes la casa de las misioneras, donde además de atentar contra la vida de Maria, destruyeron e incendiaron la iglesia o el hospital.
Alberto Vera ha confirmado los datos que se conocen sobre este atentado terrorista que ha conmocionado a la diócesis: “Hubo barullos, disparos y entraron en la casa de las Hermanas. Dispararon en la cabeza de Maria De Coppi y la mataron. La vida de Ángeles la respetaron”.
Sin duda, un mazazo para la comunidad cristiana de Nacala, ya que no se esperaba este acto sangriento contra las Combonianas: “Vamos a tener que replantearnos muchas cosas. Estamos afligidos por esta situación”, ha lamentado.
Tras el ataque terrorista, comenta el obispo español en Mozambique, el “miedo en la zona es terrible, la población ha desaparecido”. Asimismo, ha informado que los sacerdotes y monjas que lograron escapar se trasladaron a la Floresta, donde la diócesis de Nacala envió unos vehículos para desplazarse hacia el obispado, a unos 200 kilómetros de Chipene: “Están en camino, porque las carreteras son malas”.
Sobre la misionera asesinada, Alberto Vera la ha calificado una “santa” que desde hace casi seis décadas está con los más necesitados de Mozambique. Su cuerpo además también está de camino a la diócesis de Nacala: “Degollaron a otras dos personas, quemaron el centro de salud, la casa de las hermanas, entraron en la iglesia para vandalizarla... hay mucho temor”, ha reiterado con pena el obispo de Nacala.