¿Conoces la labor social de las cofradías?
La vida de las cofradías no se reduce a sacar pasos en Semana Santa. Las hermandades desarrollan un amplia labor social, desconocida para muchos, durante todo el año
Publicado el - Actualizado
5 min lectura
Antonio Bonet, doctor en arte y experto en Semana Santa, asegura que hay cofradías de todo tipo: “No hay un único perfil de lo que es una cofradía. Las hay dinásticas, abiertas, cerradas. Cofradías que admiten a todo tipo de fieles incluso a devotos que casi no son creyentes”. Pero lo más destacado de todo es que “hay cofradías que trabajan durante todo el año, y eso se nota”.
Muchas hermandades nacieron con voluntad de ayudar. Mientras que algunas no han podido continuar con su voluntad social -por la crisis económica- otras siguen organizando campañas con la intención de obtener recursos destinados a labores sociales.
Javier Vidal, de la junta Pro Semana Santa de España, mantiene que la actividad caritativa de las hermandades “se forma porque queremos acordarnos de los orígenes de las cofradías españolas que nacieron para acompañar a los enfermos, a los muertos y a toda la gente que necesite de su caridad”.
“Es toda una filosofía de vida”, sostiene Bonet, “hay una tendencia a establecer desde un inicio lo que se llama bolsas de caridad o de pobreza”. En todas las hermandades de penitencia -unas 8.500- “hay gran concienciación por lo social”. Una afirmación que ilustra con un pequeño ejemplo: “En Logroño existe una campaña solidaria que se llama 'Échame kilos'. Los cofrades portan el paso y la gente va echando alimentos. Este año se ha llegado a las 2 toneladas. ¡Eso es más de lo que pesa el paso!”.
¿Por qué esta actividad cofrade es desconocida para la sociedad?
Hay mucho silencio en las buenas obras.
El experto en Semana Santa afirma que “hay cofradías que no aluden a lo que hacen durante el año. No dicen que hacen visitas a prisiones, que colaboran directamente con Cáritas o Manos Unidas. No cuentan que hacen campañas de alimentos. Es todo un bagaje de solidaridad que se desarrolla a nivel caritativo a lo largo de todo el año”.
Vidal, por su parte, manifiesta que “es necesario potenciar mucho más la caridad y dar a conocer lo que hacemos”.
La labor social que desempeña el mundo cofrade no se circunscribe a una comunidad en concreto.
En Extremadura un alto porcentaje del presupuesto de las hermandades está destinado a las personas que atraviesan dificultades. Hay cofradías que recogen ropa, especialmente para los niños. También existen las bolsas de caridad en las que se pueden abonar los recibos de familias con necesidades... En Badajoz hay cofradías que organizan conciertos, cenas y recogen alimentos para los dos comedores sociales de la ciudad.
En Zaragoza la labor de Nuestra Señora de la fraternidad en el mayor dolor no para. Armando Tester, el presidente de la Cofradía Jesús atado a la columna, considera vital que la gente se implique: “Encuadro a las cofradías más como asociaciones públicas de laicos con una inserción eclesial y esa vida durante todo el año. Sin renunciar a esa vertiente de religiosidad popular que es más hacia el exterior de la vida de la propia cofradía que hacia dentro”.
Los 110 hermanos que sostienen la actividad caritativa de Nuestra Señora de la fraternidad en el mayor dolor se dedican a tareas diversas: “Trabajamos con la pastoral penitenciaria, entramos en el centro penitencial de Daroca y damos catequesis allí. Apoyamos a Cáritas diocesana en necesidades urgentes. Damos de comer en la Asociación el Refugio”, resumen Tester.
El pasado 5 de marzo recogieron 704 kilos de alimentos y entre la venta de chapas que realiza la obra caritativa-social y los donativos recaudaron 541.83 euros. Todo, para el comedor social San Vicente de Paúl.
En Málaga, entre otras actividades, se celebra la carrera cofrade con el único obnjetivo de ayudar a los demás Los destinatarios de lo obtenido en esta iniciativa son la obra social de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa de Málaga y la Fundación Corinto -con un economato social que atiende a familias para facilitarles el acceso a productos y alimentos de primera necesidad-.
Carrera de 7 kilómetros, caminata de 3 o bien Dorsal Cero -un donativo mínimo-.
En Valladolid, Javier Vidal nos cuenta que la pretensión de ayudar al prójimo “quedó plasmada cuando fundamos el concierto de Navidad a favor de los niños de la calle -que ahora está en un paréntesis por la crisis- con el lema 'Niños cantando para niños' traemos a Valladolid diferentes escolanías como la de Covadonga, Burgos o Vitoria para que gracias al concierto la gente pueda poner su donativo al servicio de quienes los necesitan”.
Vidal tiene claro cuál es el futuro de las cofradías: “El futuro de la Semana Santa no está en salir en las procesiones. Está en la caridad. Sin el amor a los demás, poco futuro tiene la Semana Santa en las cofradías. Si no destinamos el resto del año a pasear nuestra fe y nuestro ejemplo en la vida cotidiana, la gente no nos va a creer”.
En Sevilla, el Consejo General de Hermandades y Cofradías de la ciudad, incluye en su página web 'el libro blanco de la acción social'. El proyecto Fraternitas, destinado a mejorar las condiciones en el Polígono Sur, cobra especial relevancia en la acción de este Consejo.
La Delegación diocesana de Hermandades y Cofradías de la Archidiócesis de Sevilla colabora con varios proyectos de distintas organizaciones entre los que se encuentran:
La Confederación de Hermandades Santos Cirilio y Metodio tiene entre manos desde hace varios años un proyecto de acogida de niños Bielorrusos.
La Orden de la Santísima Trinidad Provincia España-Sur impulsó la creación de la Fundación Prolibertas cuyo principal objetivo es luchar contra la exclusión social.
La Hermandad del Dulce nombre de Bellavista mantiene abierto un comedor social para atender a los más necesitados.
La Hermandad del Rocío de Triana colabora activamente, a través de su Fundación, con el Proyecto Rebeca, un complejo residencial y ocupacional que atiende a personas con discapacidad intelectual fundamentalmente en su etapa adulta.
El própósito social con el que nacieron las cofradías, sigue hoy vigente.