La historia de la monja que ayudó a nacer a más de 3.000 niños en África

Sor Maria Concetta Esu ha sido homenajeada por el papa Francisco durante la Audiencia General

El homenaje a la monja que viajó en canoa para conocer al Papa

Marina Martín Álvarez

Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Al finalizar la Audiencia General del miércoles 27 de marzo, el papa Francisco ha homenajeado a la religiosa italiana Maria Concetta Esu. Tiene 85 años y desde hace 60 ha ayudado a nacer a más de 3.000 niños en África.

Sor Maria Concetta pertenece a la Congregación de las Hijas de San Giuseppe di Genoni y su primer encuentro con el Santo Padre fue durante la visita del papa a Bangui, África, en el 2015. Un encuentro que llamó su atención, ya que la religiosa había llegado desde el Congo hasta el punto de encuentro con el Papa en una canoa. 

Toda una vida por los demás

Maria Concetta Esu era enfermera y comadrona. Ha ayudado a nacer a 3.280 niños: ”Toda una vida por la vida de los demás -exclamó el Santo Padre- Y como esta monja, hay muchos, muchos: muchas hermanas, tantos sacerdotes, tantos religiosos que queman su vida para anunciar a Jesucristo”. Al regresar de ese viaje, el papa Francisco contó que la monja había ido en canoa desde el Congo a verle acompañada de una niña: ”Así son los misioneros, valientes”.

Según Scala News, en el 2015 el Santo Padre ya resaltó la labor de los misioneros: ”La misionariedad, no es hacer proselitismo: esta monja me dijo que las mujeres musulmanas iban donde ellas porque sabían que eran buenas enfermeras, que las trataban bien, y no les daban catequesis para convertirlas. Dan testimonio; después, a quien lo quiere, dan catequesis. El testimonio es la gran misionariedad heroica de la Iglesia. ¡Anunciar a Jesucristo con la propia vida!". 

Nos ayuda a todos a vivir el Evangelio 

Durante la audiencia, el Papa ha explicado que: "En estos días, ella vino a Roma para reunirse con sus hermanas y hoy asistió a la audiencia con su superiora. Así que pensé en aprovechar esta oportunidad para darle un reconocimiento", explicó Francisco ante los miles de fieles en San Pedro. Ha señalado que con este gesto quería darle "las gracias por todo el trabajo que ha hecho con el resto de hermanas por los hermanos africanos, y al servicio de la vida, niños, madres, familias".

Además, el Pontífice ha destacado que de esta forma también quería expresar su gratitud a todos los "misioneros y misioneras, sacerdotes, religiosos y laicos, que esparcen las semillas del Reino de Dios en cada parte del mundo" señalando que "vuestro trabajo es grande. Quemáis vuestra vida sembrando la palabra de Dios con vuestro testimonio y en este mundo no sois noticias. No salís en los periódicos". 

María Concetta regresará a África, según señaló el papa, quien le entregó una medalla y aseguró que "su ejemplo nos ayuda a todos a vivir el Evangelio allí donde estemos".

El papa ha explicado que el cardenal brasileño Cláudio Hummes siempre le cuenta que cuando viaja por los pueblos de la Amazonia va a visitar los cementerios y están llenos de misioneros. Muchos de ellos son jóvenes que han muerto por alguna enfermedad, y que han "quemado" su vida por los demás y que "todos merecen ser canonizados".

El pasado domingo, durante el rezo del Ángelus, con ocasión de la celebración por parte de la Iglesia de la “Jornada en Memoria de los Misioneros Mártires”, el papa recordó que “en el año 2018, en todo el mundo, numerosos obispos, sacerdotes, hermanas y fieles laicos han sufrido violencia" y que "han sido asesinados 40 misioneros, casi el doble que en año precedente”.

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