El bautizo más especial que se ha celebrado en el Vaticano esta semana: "Fue un gran regalo"

En un momento muy difícil en todo el mundo también hay momentos para celebrar alegrías. Es lo que ha pasado en la tarde del pasado lunes en la capilla de Santa Marta donde el Papa Francisco ha bautizado Zakhariy, un bebé ucraniano de tres meses.

Según ha informado Vatican News, el papá se llama Vitaly, de 37 años, su mamá Vita, de 35, y el pequeño es el último de diez hijos, siete niños y tres niñas. La familia vive al oeste de Ucrania, en Kamianets-Podilskyi, en una región que está “relativamente a salvo” de la brutal guerra que sigue en el país.

"Nunca podrái ni siquiera soñar que podríamos estar con el Santo Padre"

Pertenecen al Camino Neocatecumenal y en los últimos años han experimentado la providencia en medio de muchas dificultades familiares, agravadas aún más tras la invasión rusa: “Todo lo superamos gracias a Dios, porque Dios siempre cuida de nuestra familia – ha afirmado Vita, la madre del pequeño – hay guerra en el país y es muy difícil. Todos rezan para que esta guerra termine pronto, que todos los prisioneros regresen a sus hogares y que no haya más asesinatos”.

"El bautismo de ayer fue un gran regalo para nuestra familia […] Nunca podría ni siquiera soñar que podríamos estar con el Santo Padre y que él podría bautizar a nuestro hijo. Pero Dios está haciendo con nosotros una historia tan maravillosa, que todavía no lo entendemos del todo", ha subrayado la mamá del bebé.

En el rito del bautizo también estuvo presente monseñor León Dubrawski, obispo de Kamianets-Podilskyi de los latinos, quien recordó cómo el amor de Dios se transmite de generación en generación a través de la familia. Fue el Prelado quien acompañó al joven matrimonio al Vaticano.