Un grupo armado secuestra a un sacerdote en el norte de Nigeria: "Solicitamos una oración intensa"

El pasado 13 de septiembre, un grupo de hombres armados secuestraron al sacerdote Luka Benson Yakusak. El presbítero ejerce su ministerio pastoral como párroco de la iglesia de San Mateo, en la localidad de Anchuna (Nigeria), perteneciente a la diócesis de Kafanchan.

Según la información proporcionada por la diócesis, los perpetradores del secuestro entraron al domicilio del sacerdote durante la noche, para después llevárselo. Según un testigo que presenció el suceso, el asalto al domicilio del P. Benson se produjo aproximadamente a las siete y media.

Por ahora, tanto el sacerdote como los secuestradores se encuentran en paradero desconocido. Tampoco han establecido contacto con la Iglesia local, la familia o los allegados del presbítero para exigir una recompensa.

Mientras tanto, la diócesis ha emitido un comunicado pidiendo oraciones a los fieles por el sacerdote y, además, "a la vez que solicitamos una oración intensa por su liberación rápida y segura, igualmente deseamos hacer un llamado a todos y cada uno a que se abstengan de tomar justicia en sus manos".

Los secuestros de sacerdotes: una realidad muy frecuente en los países africanos

Por desgracia, los clérigos son el objetivo de los diferentes grupos criminales y terroristas que habitan en África. El pasado 8 de julio, Aleluya se hacía eco del rapto de otro sacerdote nigeriano, Elijah Juma, en la diócesis de Maiduguri. Afortunadamente, el P. Juma consiguió escapar de la célula yihadista que le retenía nueve días después.

Sin embargo, el país africano ha sufrido el asesinato de dos sacerdotes en 2021, entre ellos el P. Alphonsus Bello, quien tan solo tenía treinta años y servía pastoralmente en la localidad de Malufanshi, también al norte de Nigeria. Los terroristas asaltaron la parroquia San Vicente Ferrer, disparando contra los presentes y dando muerte al presbítero.

En otros países de África también se sufre el yugo de otros grupos, principalmente yihadistas. Entre los múltiples secuestros que se han producido destaca el de la monja Gloria Cecilia Narváez, de la que no se tienen pruebas fehacientes de vida desde hace varios meses. La religiosa fue secuestrada hace cuatro años por el grupo yihadista Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes (GSIM).

La libertad religiosa en África, cada vez más en peligro

La realidad de los países africanos ha sido denunciada en múltiples ocasiones por la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), que cada año elabora un Informe de Libertad Religiosa. Normalmente, varios países africanos destacan en cuanto a nivel de persecución religiosa en este documento, debido a la proliferación de grupos yihadistas en la región.

A pesar de la aparente mejora en calidad de libertad religiosa en los países africanos, la asociación ha advertido de una extensión del fenómeno yihadismo en la zona, así como del intento por parte de grupos como Daesh de conformar un "califato transnacional".

"Aunque musulmanes y cristianos son víctimas por igual de la violencia extremista, con la creciente radicalización islamista, los cristianos tienden a convertirse cada vez más en un objetivo específico de los terroristas que pretenden eliminar el pluralismo social y religioso característico de la región", denuncia ACN.