Otorgados por la CEE
Premios ¡Bravo! 2017: así ha sido la ceremonia
Unos galardones que reconocen a los profesionales de la comunicación que se hayan distinguido por el servicio a la dignidad del hombre, los derechos humanos y los valores evangélicos.
Publicado el - Actualizado
4 min lectura
Hoy se han entregado en el Salón de la Asamblea Plenaria de la sede de la Conferencia Episcopal Española en Madrid, los Premios ¡Bravo! 2017, que convoca cada año la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social y que reconocen la labor de reputados comunicadores en varias facetas.
En la ceremonia de entrega, el presidente de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social, el obispo electo de Getafe monseñor Ginés García Beltrán, ha alertado sobre las nuevas dificultades en el mundo de la comunicación, y que el obispo considera que son tres.
En primer lugar, monseñor García Beltrán ha citado la posverdad. “Una nueva verdad, definitiva, absoluta, indiscutible. Esa verdad que no tiene vínculos con la realidad sino con los sentimientos, los deseos, los consensos, las preferencias o las apetencias. El mundo sigue necesitado de la verdad para crecer, y por tanto necesita servidores de la verdad en la comunicación”.
En segundo lugar, el obispo electo de Getafe ha aludido a los 'filtros burbuja' de Internet. “Internet está actuando como un filtro más que limita mi conocimiento del mundo. Por otra parte, el conocimiento tan profundo de las personas que genera Internet y la consecuente capacidad de segmentar las audiencias con una precisión inimaginable le ha convertido en una herramienta indispensable para la difusión de ideas, productos y servicios”, ha señalado monseñor García Beltrán, que también ha afirmado que “hoy, el control de la sociedad, de lo que pensamos y de aquello sobre lo que pensamos, es más posible con internet.
Por último, el prelado ha advertido de la proliferación de noticias al servicio de ideologías. “Es verdad que la tensión, el quebranto y la polémica dan más réditos de audiencia, pero también dejan una sociedad más deshilachada y menos cohesionada. Es imprescindible superar el discurso del enfrentamiento en nuestros medios, el de la confrontación, la tensión o el odio que estira y visibiliza los extremos y acaba por romper la sociedad” ha añadido monseñor García Beltrán.
El presidente de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social ha concluido lanzando un llamamiento y recordando que “el periodismo no puede contribuir al quebranto de la sociedad sino a la cohesión de sus miembros; al conocimiento de las razones de los demás y de las propias para facilitar la comprensión de que todos buscamos lo mejor”.
Por parte de los ganadores ha tomado la palabra Julián del Olmo, Premio ¡Bravo! Especial 2017, que ha recordado que la Iglesia “lleva la Comunicación en su ADN porque es esencial a su misión evangelizadora: transmitir la Buena Noticia de Jesús”, ha señalado del Olmo, que también ha dicho que “el arte, la cultura y los púlpitos fueron durante siglos los grandes medios de comunicación de la Iglesia”, que “ahora tiene que “jugar fuera de casa” donde a veces se escuchan “pitos” en las gradas”.
Julián del Olmo, sacerdote y periodista, ha recibido el Premio ¡Bravo! Especial 2017 por su trayectoria profesional y pastoral, como director del programa 'Pueblo de Dios', de La 2 de Televisión Española, y por su trabajo en revistas de información religiosa.
Estos han sido los otros ganadores de este año:
El Premio ¡Bravo! de Prensa ha recaído en Antonio Pampliega, corresponsal de guerra que ha sido capaz de “recoger la larga tradición del mejor reporterismo de guerra y de tragedias humanitarias y pone nombre y rostro a las personas que lo sufren”.
El Premio ¡Bravo! de Radio ha sido para nuestro compañero Pepe Domingo Castaño, presentador y animador de 'Tiempo de Juego' en la Cadena COPE, por su “capacidad creativa en la comunicación radiofónica”.
Sergio Martín, director de 'Los Desayunos' de Televisión Española, ha recibido el Premio ¡Bravo! de Televisión por haber “enfrentado el incremento de la demanda de información con solvencia y credibilidad”.
El Premio ¡Bravo! de Nuevas Tecnologías ha sido para Aleteia, un portal de información y pensamiento católico, por “ejemplificar como la presencia de la Iglesia en el mundo digital y sus redes sociales es buen medio para comunicar la Buena Noticia”.
El Premio ¡Bravo! de Cine ha recaído en la película Converso, de David Arritíbel, por ilustrar “con elegancia cómo la belleza -en especial la música- es lugar de encuentro humano y espiritual”.
Íñigo Pírfano ha recibido el Premio ¡Bravo! de Música por su iniciativa A Kiss for All the World, por acercar “la obra de Beethoven a lugares en los que las personas nunca han tenido la posibilidad de acceso a la belleza de la gran música y a su contenido espiritual profundo”.
El Premio ¡Bravo! De Publicidad ha sido para la campaña Con los abuelos somos +Familia de Hirukide, por evidenciar “como los abuelos son el mejor ejemplo de cariño, paciencia y valores que tanto ayuda a sostener a las familias”.
Y el Premio ¡Bravo! Al Trabajo Diocesano ha sido ex aequo a la cobertura informativa de los años jubilares de Sto. Toribio de Liébana y Caravaca de la Cruz.