La Virgen de la Paloma, una imagen que reúne a miles de madrileños desde mediados del XVIII

A mediados de agosto se celebra en Madrid una celebración religiosa muy castiza, que cuenta además con un curioso origen. El centro de todos los actos que se llevan a cabo en honor a la Virgen giran en torno a un pequeño lienzo del siglo XVIII. Según indica la tradición, a finales de este siglo la pintura se encontraba en un corral donde se almacenaba la leña. Un hombre se dio cuenta de la presencia de la preciosa imagen y de su mal estado, por lo que tomó una decisión. Se la regaló a unos niños que por allí se encontraban.

La tía de uno de estos pequeños, Andrea Isabel Tintero, decidió comprarle la imagen a su sobrino a cambio de muy poco dinero. Asimismo, decidió restaurar la pintura, enmarcarla y colocarla en la entrada de su casa que se encontraba en la calle de la Paloma de Madrid. En un corto espacio de tiempo se le comenzaron a atribuir a la imagen cualidades religiosas y su fama fue creciendo por el vecindario.

Llegó a tal punto esa devoción y fe que Andrea Isabel tiene que habilitar uno de los espacios del hogar para que la gente realice el culto a la imagen.

A partir de entonces se inició la costumbre entre las madres de presentar a sus hijos ante la imagen de la Virgen de la Soledad de la calle de La Paloma, costumbre que aun perdura y que se celebra especialmente el 2 de febrero, festividad de La Presentación de Jesús, o “día de las candelas”, con una popular y bulliciosa asistencia de padres y abuelos que llevan a sus hijos a cumplir esa devoción.

Pronto se quedará pequeña. Así que, en 1795 se levantó una capilla para custodiar el lienzo. Finalmente es a finales del siglo XIX cuando se contruye la Iglesia que sigue guardando aquella imagen que unos niños, sin saberlo, rescataron de un pequeño corral.

Durante la invasión del ejército de Napoleón, Isabel escondió el lienzo para evitar que fuese profanada. Para recordar a esta vecina, tras su fallecimiento, la calle que da acceso a la Iglesia de la Paloma lleva su nombre y la placa representa la escena del hallazgo del cuadro.

Las investigaciones del historiador Don Armando Rubén Puente, acreditan que estamos ante un lienzo de Nuestra Señora de la Soledad, más tarde llamado “Virgen de la Paloma”, por ser en la Calle de la Paloma, de Madrid, donde Isabel Tintero inició el culto en el portal de su casa.

La Biblioteca de la Parroquia de la Virgen de la Paloma

En la Parroquia funciona una biblioteca y una videoteca de espiritualidad. Una cuidada selección que tiene como objetivo ayudar a la vida espiritualidad de las personas. Están catalogados según una clasificación temática: Ciencia, Conversiones, Espiritualidad, Historia, Literatura...

Es por ello que ponen a disposición de los feligreses reseñas de los fondos que cuentan en su página web para que podamos disfrutar de los mismos cuando las puertas de la Iglesia vuelvan a abrirse a todos los feligreses.

HIMNO DE LA VIRGEN DE LA PALOMA

Oh, Virgen de la Paloma,

Madre de la Soledad,

con fervor, Madrid entona

este canto a su Señora

la Virgen más popular.

A tus pies, Madre querida,

nuestros hijos te ofrecemos

que tu mano generosa

les protega desde el cielo.

Oh, Virgen de la Paloma,

Madre de la Soledad,

con fervor Madrid entona

este canto a su Señora

la Virgen más popular.

Salve, Reina de los Cielos,

Virgen Santa madrileña.

eres tú nuestro consuelo,

nuestra Madre verdadera.

Oh, Virgen de la Paloma,

Madre de la Soledad,

con fervor Madrid entona

este canto a su Señora

la Virgen más popular.