Sangre que puede ser para ti

La sangre no se puede fabricar ni comprar y, por eso, es tan valiosa. También para los siniestros viales, porque puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.

Es difícil determinar con exactitud cuántas de los 1,7 millones de donaciones de sangre que se produjeron en 2021 en España se destinaron a víctimas de siniestros viales. Los expertos suelen decir que no se dona con un objetivo concreto, sino para cubrir las necesidades de sangre que hay, ya sea para programar intervenciones quirúrgicas, elaborar medicamentos o atender un siniestro en la carretera.

Politraumatizados

La doctora Elena Madrigal, coordinadora de la Red de Hemodonación, Hemoterapia y Hemovigilancia de Castilla–La Mancha, explica que las víctimas de un siniestro vial “son pacientes muy complicados” porque “necesitan un abordaje multidisciplinar de muchos profesionales y servicios, tanto el abordaje en el ámbito prehospitalario por los profesionales de la gerencia de urgencias y emergencias como a nivel hospitalario, pasando por muchos servicios como urgencias, unidad de cuidados intensivos, radiología, anestesia, quirófano, traumatología, cirugía vascular, etc. Además de los servicios de apoyo como el Servicio de Transfusión, Servicio de Farmacia o el de Análisis Clínicos, entre otros. Estos pacientes se denominan pacientes politraumatizados y son de extrema gravedad”.

En estos casos, añade, es fundamental “reponer todos los componentes sanguíneos que se pierden durante el gran sangrado y asegurar que el oxígeno llega a todos los tejidos y órganos, así como los factores de coagulación para ayudar a parar la hemorragia, entre otras medidas”.

Así, Pablo de Paz, responsable de Comunicación de Federación Española de Donantes de Sangre, apunta que las operaciones o las transfusiones pueden programarse en función de la situación de las reservas de sangre, pero eso es algo inviable cuando se trata de un siniestro vial con víctimas politraumatizadas. Son situaciones que nadie espera, que nos puede pasar a cualquiera y, “en esos casos, si no hay sangre, las personas heridas se mueren”.

Las donaciones suben

Cada día en España se producen unas 5.000 donaciones de sangre, que salvan entre 80 y 90 vidas. Según los datos del Ministerio de Sanidad, en 2021, se registraron 1.720.402 donaciones, un 5,4% más que el año anterior. Ese año, hubo 1.133.131 donantes, que realizaron de media 1,43 donaciones cada uno. Otros 197.763 donantes fueron excluidos, de forma temporal (183.566) o permanente (14.197), por diversas razones. El nivel de donación en España es del 36,48 donaciones por 1.000 habitantes, el más alto de los últimos años.

La hematóloga Ana Arruga, responsable de Fraccionamiento, Distribución y Control de Calidad del Centro de Transfusiones de la Comunidad de Madrid (CTCM), asegura que para cubrir todas las necesidades de sangre de la comunidad son necesarias unas 900 donaciones al día (240.000 al año), un objetivo que se consigue año tras año desde hace algún tiempo: “Somos autosuficientes para las trasfusiones directas, pero vamos más justos con la fabricación de medicamentos que proceden del plasma. Por eso, insistimos en que se done. No queremos ni que sobre sangre ni que falte porque somos conscientes de que la donación tiene un coste personal”.

También en Castilla–La Mancha se cubren las necesidades de sangre, incluida una “situación de transfusión masiva como es un accidente de tráfico”, explica la doctora Madrigal. En general, en la comunidad castellanomanchega se precisan unas 400 donaciones diarias para garantizar el abastecimiento de componentes sanguíneos. En 2022, atendieron a 86.639 donantes de sangre y plasma, 4.516 más que en 2021.

Personas comprometidas

Elena Madrigal subraya la generosidad de los donantes que regalan salud y bienestar general: “Son personas comprometidas con la comunidad, fieles a la donación y a la llamada de los Centros de Transfusión para las jornadas de donación y ante una necesidad puntual”.

Tanto la doctora Arruga como la doctora Madrigal destacan que es necesario reforzar las campañas de divulgación en los períodos vacacionales (campañas en las que los medios de comunicación también deben colaborar), para que las personas se vayan a disfrutar de sus días de descanso tras realizar su donación.

Arruga señala además que aún no se ha recuperado el nivel de donaciones que había antes del covid–19: “La pandemia nos separó de los hospitales y está costando volver. Además, se están recuperando todas las operaciones que se aplazaron durante ese tiempo, por lo que las necesidades son mayores. Todo esto hace que, en algunos momentos, vayamos justos. El panorama cambiaría radicalmente si convencemos a los donantes que solo donan una vez al año que lo hagan dos”. También añade que las nuevas generaciones están donando en la misma medida que las más mayores: “Nuestros jóvenes sí donan. Lo comprobamos porque estábamos preocupados y nos dimos cuenta de que había más donaciones de adultos que de jóvenes, pero la razón era porque son más”.

14 de junio

La doctora del CTCM nos recuerda que todos los grupos son siempre bienvenidos, independientemente de cómo estén las reservas de cada uno de ellos porque “toda la sangre se necesita, ya que también se utilizan los componentes por separado”.

En este sentido, la doctora Madrigal dice que el 14 de junio es el Día del Donante de Sangre, una buena oportunidad para seguir insistiendo en la importancia de la donación porque “cualquier persona puede requerir una transfusión a lo largo de su vida”.

Pablo de Paz. Responsable de Comunicación. Federación Española de Donantes de Sangre

“Hay que donar porque la sangre ni se compra ni se fabrica”

Comenzó a donar con 20 años (tiene 58), aunque empezó a interesarse más por las donaciones cuando dejó de ser minero. Reside en Asturias (comunidad autónoma uniprovincial), con tres hospitales de cabecera que, según dice, cada día necesitan unas 200 donaciones de sangre: “Ese es el sostén principal de la sanidad”. Subraya que la única manera de conseguir sangre es que se done: “No se puede comprar ni fabricar. Tan solo realizar donaciones de forma voluntaria y altruista”. Asegura que en este tema habría que hacer hincapié desde la infancia porque no es secundario: “Es evidente que hoy estás sano, pero mañana puedes necesitar sangre”. Eso sí, pide a la DGT que incluya algo sobre donaciones en sus mensajes porque “así los hospitales tendrían sangre suficiente si les llegan víctimas de un accidente múltiple”. Cree que hay que reforzar las campañas durante los períodos vacacionales (Navidad y verano, en especial) porque son momentos en los que se incrementa la demanda de sangre en los hospitales y bajan los donantes.

Carla Sanz. Más de 65 donaciones

“Cualquier día puedes necesitar sangre, con 20 o con 60 años”

Su padre era donante de sangre y ella comenzó con 18 años, en cuanto pudo, y ya lo hace de forma regular dos o tres veces al año. Es lo que se llama “una gran donante”, con más de 65 donaciones. Asegura que, a pesar de los muchos avances que se han producido en medicina, tanto la sangre como los órganos solo pueden conseguirse mediante donaciones: “Donar es una forma de ayudarnos unos a otros, contribuir a mejorar la calidad de vida sin riesgos. Tenemos que concienciarnos de que el beneficio es impresionante”. A quienes aún no donan por miedo, les dice que lo más grave es “el pinchazo”, pero eso es similar a hacerse un análisis o ponerse una vacuna. Considera que este mensaje no llega a calar del todo en los más jóvenes, más metidos en su mundo individual: “Todos los días para hacer una vida normal se necesita sangre y cualquier día puedes ser tú quien la necesite sangre, con 20 o con 60 años, sobre todo para los accidentes de tráfico y los jóvenes están más implicados en ellos”.

En la gran mayoría de los casos, la respuesta es sí. Los requisitos son:

? Tener entre 18 y 65 años.

? Pesar más de 50 kilos.

? Se trata a cada donante de forma individualizada, ya que se rellena antes un cuestionario. Además, el equipo médico del punto de donación realiza un pequeño examen médico al donante (tensión, frecuencia cardíaca, hemoglobina, etc.).

Se puede donar en puntos fijos y móviles, en centros hospitalarios y en los centros de transfusión de las comunidades autónomas. Allí, podemos donar:

? Sangre total: El proceso dura 35 minutos en total (10, solo la donación) y se extraen 450 ml. Los hombres pueden donar hasta 4 veces al año. Las mujeres, 3.

? Plasma (Plasmaféresis): Se extrae la sangre, mediante un separador celular, se retiene el plasma y se devuelve el resto al donante por la misma vía. Dura 45 minutos y la recuperación del paciente es muy rápida. Se puede donar plasma cada 15 días.

? Plaquetas (Plaquetoféresis): Se extrae la sangre y una máquina especial de aféresis separa los componentes de la sangre, obteniendo solo las plaquetas y devolviendo el resto al donante. Dura unos 60 minutos y es totalmente inocuo.

¿Cuál es la caducidad de estas donaciones?

La sangre y los concentrados de hematíes duran 42 días. El plasma (lo que más se utiliza en siniestros de tráfico), hasta tres años, porque se congela. Las plaquetas, solo entre cinco y siete días (estas últimas se utilizan en pacientes con alteraciones en la coagulación, como enfermos oncológicos y hematológicos y en trasplantes).

En Castilla–La Mancha funcionan dos helicópteros, Gigante 2 y Gigante 3, que prestan atención sanitaria 24 horas y que disponen de medios para conservar y transfundir sangre durante el vuelo, a bordo y en el propio lugar. El primero tiene su base en Ciudad Real; el segundo, en Cuenca. De esa forma, pueden atender in situ a las personas heridas en un siniestro vial y comenzar allí mismo el tratamiento para su recuperación.

Por cada donación, se obtiene 1 concentrado de hematíes, 1 unidad de plasma y plaquetas. Con 5 donaciones de sangre se realiza 1 pool de plaquetas, que equivale a 1 tratamiento por paciente. A una persona politraumatizada tras un siniestro vial se le puede transfundir 3 o 4 pooles de plaquetas en el primer día del accidente. Es posible que los siguientes días necesite más sangre y componentes, ya que muchos necesitan ser operados de nuevo para realizar cirugías definitivas.

? Enfermo de leucemia: hasta 250 donaciones.

? Trasplante de hígado: entre 30 y 170 donaciones.

? Trasplante de médula ósea: hasta 50 donaciones.

? Aneurisma roto: entre 30 y 40 donaciones.

? Siniestro vial: entre 20 y 30 donaciones.

? Trasplante de corazón: hasta 20 donaciones.

? Intervención quirúrgica: hasta 20 donaciones.

? Parto complicado: entre 4 y 6 donaciones.

Para más información consulta la web de la DGT.

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