La Bolsa se lame sus heridas a la espera de noticias de Jerome Powell

El índice Ibex 35 ha cerrado en 8.971 puntos con baja de un 0,17 por ciento. El mes de julio se salda con una caída del 2,5 por ciento

La Bolsa se lame sus heridas a la espera de noticias de Jerome Powell

Fernando Mañueco

Publicado el - Actualizado

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La Bolsa ha operado con pequeños altibajos después de la fuerte caída del ayer, cuando perdió un 2 y medio por ciento y se anotó la mayor caída del año. El índice Ibex 35 ha cerrado en 8.971 puntos con baja de un 0,17 por ciento. El mes de julio se salda con una caída del 2,5 por ciento. Siguen débiles los bancos. El Santander continúa por debajo de cuatro euros por acción, mientras BBVA se aleja de los cinco. BBVA a ganado 2.442 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un 3,7 por ciento menos que en emismo periodo del pasado ejercicio.  

Muy plano hoy Laboratorios Grifols, que ha reducido su beneficio neto un 10 por ciento entre enero y junio, hasta 287 millones de euros. Ence ha sufrido un tremendo batacazo, tras concerse que su beneficio se ha reducido un 51 por ciento en el primer semestre. Son resultados peores de lo esperado. Destaca también la cáida de Viscofán, que ha publicado unos resultados que no han gustado al mercado. Ganancias importantes en Técnicas Reunidas. Su beneficio se ha disparado un 143 por ciento gracias, en parte a un ajuste financiero en sus cuentas. Ha subido Bolsas y Mercados Españoles, que ha ganado 63,4 millones de euros en la primera mitad del año, lo que supone un descenso del 11,8 por ciento. Se ha notado la caída de los volúmenes de contratación. BME ha anunciado el pago de un dividendo de 40 céntimos por acción el próximo 13 de septiembre. Los analistas de Bankinter esperan de BME un beneficio de 126 millones al cierre de este año y de 180 millones el próximo ejericicio.

Hoy los inversores han contenido el aliento a la espera de noticias de la Reserva Federal de Estados Unidos, la Fed para los amigos. Esperan una rebaja de un cuarto de punto en el precio del dinero, pero sin descartar por completo que finalmente retrasase esa medida hasta septiembre. Sus decisiones se conocerán esta tarde, a las ocho, ya con los mercados europeos cerrados. La rueda de prensa del presidente de este organismo, Jerome Powell, comenzará media hora más tarde. Los mercados le van a escuchar con mucha atención.

 El euro cotiza estable en 1,1130 dólares. El presidente Trump ha presionado un poco más a la Reserva Federal no sólo para que reduzca el precio del dinero, sino para que sea muy agresiva con sus rebajas de tipos de interés. Quiere que el dólar pierda fuerza frente a las demás grandes monedas del mundo para beneficiar a las empresas exportadoras de EEUU. De momento, las Bolsas de Wall Street han abierto esta tarde con movimientos muy cortos. Los analistas del banco de negocios Goldman Sachs esperan ver al índice S&P 500 a fin de año en la zona de los 3.100 puntos, frente a la previsión anterior de 3.000 puntos. Por su parte, los expertos de JP Morgan creen que todavía pueden verse nuevos máximos históricos en las Bolsas de Nueva York, antes de que la economía estadounidense vaya perdiendo fuelle o incluso entre en recesión.

Así que los inversores siguen analizando con lupa los indicadores económicos que se van publicando. No queda otra. La inflación en la zona euro se ha situado en el  1,1 por ciento, frente al 1,3 anterior y muy lejos del objetivo del 2 por ciento que maneja el BCE.  Es el nivel más bajo de IPC en Europa desde el año 2016. Hoy la economía alemana ha ofrecido datos agridulces. Han aumentado las ventas al por menor en junio a un ritmo del 3,5 por ciento, cuando se esperaba un crecimiento de apenas medio punto. Sin embargo, la tasa anual se ha contraído un 1,6 por ciento. Se esperaba una mejora. La tasa de paro se ha mantenido estable en Alemania en el 5 por ciento. Hay 2,28 millones de desempleados en aquél país. El corazón económico de la zona euro continúa enfriándose. El PIB de la zona euro ha crecido un 1,1 por ciento en tasa interanual en el primer semestre, frente al 1,2 precedente.  En España van mejor las cosas, aunque la economía ha perdido algo de impulso en el último trimestre. El PIB crece a un ritmo del 2,3 por ciento en tasa anual, que es una décima menos que la lectura anterior. 

En China se ha publicado un buen dato de actividad en el sector manufacturero. Continúa por debajo de 50 puntos, lo que indica contracción, pero ha mejorado en julio más de lo que se esperaba. La lectura ha sido de 49,7 puntos, tres décimas más que en el mes anterior. Por el contrario, ha empeorado ligeramente la actividad en el sector servicios. En Japón, por su parte,  la confianza del consumidor se ha deteriorado ligeramente. Ha quedado por debajo de la lectura anterior y por debajo de las previsiones de los analistas. 

En el mercado de divisas, la libra esterlina sigue de capa caída, aunque hoy ha subido ligeramente, para cambiarse a poco más de 1,22 dólares. Sigue en sus niveles más deprimidos desde el año 2017. Algunos analistas esperan ver a la libra en la paridad con el dólar si finalmente se materializa una divorcio caótico y sin acuerdo entre el Reino Unido y la Unión Europea. Una libra, un dólar. En el mercado de deuda, la prima de riesgo de España ha mejorado susancialmente, ha bajado hasta 72 puntos. La rentabilidad de los bonos a diez años baja a un increíble 0,30 por ciento. El “bund” alemán al mismo plazo ahonda en su rentabilidad negativa. Ofrece un menos 0,42 por ciento. Algo nunca antes visto. Mañana el Tesoro español colocará bonos y obligaciones con vencimiento a 5, 10, 15 y 30 años.  Quiere captar hasta 4.500 millones de euros. En agosto habrá otra subasta de deuda a medio y largo plazo, -el día 14-, y dos de letras, los días 13 y 20. En el mercado de materias primas, el petróleo ha cerrado con  ganancias, por encima de 65 dólares por barril, tras conocerse un fuerte descenso en los inventarios de crudo, gasolina y productos destilados en Estados  Unidos. 

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