La hostelería mira hacia agosto con la esperanza de salvar la temporada de verano
El sector del turismo está viviendo una temporada anómala, con cancelaciones de última hora y temor a viajar por miedo a los contagios
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Es una campaña estival durísima, la más dura que se recuerda, con reservas y cancelaciones de última hora, y pendientes de los rebrotes. Si algo se está salvando es gracias al turismo nacional. Cada vez se reserva más tarde, nos dicen todas las fuentes hoteleras, apenas con dos días de antelación o incluso menos, “prácticamente para entrar” y las estancias “son muy cortas, de jueves a domingo”.
Nuria Montes, Secretaria General de los Hoteleros Valencianos, HOSBEC, explica a COPE que es una ocupación sierra “los fines de semana se está llegando al 60 por ciento pero a diario las cifras son más bajas”.
La mitad de los hoteles todavía cerrados
Más de la mitad de los hoteles en las zonas de sol y playa por excelencia todavía no han abierto. En Benidorm, desde donde nos habla Nuria Montes, hay 41.000 camas y ha abierto el 60% con una ocupación media del 40.
“Es muy difícil hacer previsiones porque se han flexibilizado al máximo las políticas de cancelaciones y se pueden hacer hasta prácticamente el día de entrada pero también las contrataciones están entrando casi el mismo día de llegada”. En Mallorca esperan que a finales de julio se hayan podido abrir el 52% de los establecimientos hoteleros, todo depende de la demanda.
Ahora están solo en el 32 por ciento de ocupación. En Murcia están en el 45% y en la Costa del Sol no llegan al 35%, de las más de 88.000 plazas hoteleras, hay abiertas 43.000. Miran con esperanza a agosto, un comienzo tardío de la temporada alta, si la situación sanitaria lo permite.