¿Prohibir los honorarios de las inmobiliarias por alquilar? Desde el sector advierten: "No es la solución"
El gobierno negocia esta propuesta en la Ley de Vivienda. Los inquilinos son escépticos, mientras que los profesionales creen que tendrá el "efecto contrario al que persigue"
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Prohibir los honorarios que las agencias inmobiliarias cobran a los inquilinos para acceder al alquiler. La propuesta está encima de la mesa dentro de la futura Ley de Vivienda. Y no sin polémica.
Son muchos los inquilinos en búsqueda de alquiler que se ven obligados a renunciar a este tipo de inmuebles, gestionados por profesionales, debido al alto desembolso que estos honorarios, unidos al resto de abonos, terminan suponiendo de entrada. Por su parte, las agencias inmobiliarias redoblan tambores de guerra y advierten: "causará el efecto contrario al perseguido".
La propuesta de que los inquilinos dejen de pagar los honorarios a las agencias inmobiliarias no es nueva. De hecho, estaba en el primer borrador de la Ley de Vivienda que Unidas Podemos propuso al PSOE. Sin embargo, no llegó a incluirse en el anteproyecto aprobado en febrero de 2022, que lleva un año guardado en un cajón.
Pasado este tiempo, parece quelas negociaciones en el seno del gobierno para retomar la Ley de Vivienda regresan, y con ellas, esta propuesta, algo que ha confirmado la propia ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra. Lo que se plantea es que sean los propietarios quienes asuman ese coste.
Un mes 'extra'
Ángel tiene 30 años y vive de alquiler en Madrid. "Es como un mes 'extra'", explica. "Al final, si quieres vivir en un piso de una agencia tienes que pagar la fianza, la renta del mes y la comisión", señala. Con la escalada de precios, él, de hecho, confiesa que ha tenido que renunciar a este tipo de viviendas. "Prefiero alquileres de particulares. Pagar en Madrid la renta del mes, la fianza y la agencia para entrar al piso.. al final son mínimo 1.500 euros de golpe", argumenta.
Es escéptico sobre la posibilidad de prohibir este tipo de honorarios. "Me cuesta creer que se vaya a prohibir. Es el negocio de la inmobiliaria", expone. Y va más allá. "Si finalmente es el propietario quien paga la comisión, dudo mucho que eso no lo repercuta en la renta mensual, con la demanda de pisos que hay", cree.
"Somos la solución y no el problema"
Las inmobiliarias, por su parte, han reaccionado con críticas. La Federación de Agencias Inmobiliarias (FAI) asegura que es una "intervención del libre mercado que causará el efecto contrario", explica a COPE, José María Alfaro, su portavoz. "El efecto contrario es que se reduzca la oferta o se destinen a otro tipo de alquiler", detalla.
"Los honorarios que cobran las inmobiliarias no son el problema de los altos precios que se pagan por alquilar una vivienda. La forma en que un agente inmobiliario repercute su servicio tiene que ver con la naturaleza del servicio que presta, ya que asiste tanto a arrendadores como inquilinos y cobra solo en función del resultado", señala.
"El problema del alquiler es un problema que solo se podrá solucionar con medidas que generen mayor oferta a medio y largo plazo", resume.
100.000 agentes inmobiliarios
En España, hay aproximadamente 100.000 agentes inmobiliarios. "Somos intermediarios", justifica Alfaro. "Si es el propietario el que tiene que pagar, se podrían poner en riesgo muchos puestos de trabajo porque hay agentes inmobiliarios que se dedican exclusivamente al mercado del alquiler", defiende.
¿Quién paga su trabajo?
En el mercado del alquiler, los honorarios son abonados por los inquilinos. "El propietario tiene el poder porque tiene un bien preciado y se vuelve exigente. Si tuviéramos un mercado dado la vuelta, donde la oferta superara a la demanda, la exigencia vendría más del lado del inquilino. Poner el énfasis en intervenir la libertad de prestar un servicio es algo grave, que no va a solucionar el problema", argumenta.
"Somos parte de la solución, no del problema. Prohibir el cobro de honorarios no evitará que el coste que presta un profesional acabe repercutiendo indirectamente al inquilino en términos económicos y de inseguridad jurídica" señalan.
Por eso, apuestan por medidas que incentiven la oferta para paliar la demanda existente en otras muchas ciudades. "Nada se conseguirá por lavía de la limitación de precios, regulación o prohibición. Al contrario, provocará un éxodo de parte de la oferta hacia otras fórmulas diferentes de alquiler no limitadas", aseguran.