¿Cuánto durará la nueva legislatura en Castilla y León, cuatro años o hasta 2022?
La convocatoria de elecciones abre un nuevo periodo electoral en Castilla y León. El Ejecutivo que salga proclamado de las urnas el próximo 13F enfrentará un mandato de cuatro años
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La tensión en el seno de muchos gobiernos autonómicos ha ido recrudeciéndose con el paso de los últimos meses. Un continuo susurro de traiciones y de cruces de acusaciones; de mociones de censura frustradas y otras que quedaron al filo de su debate siguen marcando la agenda política en muchas regiones de España.
Ahora –a la determinación de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso que, ante una más que posible declaración de ruptura por parte de sus exsocios de Ciudadanos decidió adelantar los tiempos y convocar unos comicios cuyos resultados supondrían a la postre la primera gran derrota electoral para el 'sanchismo'– se ha sumado el anuncio del presidente de la Junta de Castilla y León, el también 'popular' Alfonso Fernández Mañueco, de anunciar la disolución de las Cortes regionales y la consecuente convocatoria electoral anticipada en esta comunidad autónoma para el 13 de febrero de 2022.
“Hoy, 20 de diciembre, acabo de remodelar mi Gobierno, con posterioridad he firmado el Decreto de disolución de las Cortes de Castilla y León y la convocatoria anticipada de Elecciones Autonómicas en Castilla y León para el día 13 de febrero de 2022”, ha informado a primera hora de la mañana el jefe del Ejecutivo autonómico a través de cuenta en Twitter.
Esta remodelación del Gobierno supone la destitución de todos los consejeros de Ciudadanos, entre los que figuran el vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Acción Exterior y Ordenación del Territorio, Francisco Igea; la consejera de Sanidad, Verónica Casado; la consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo; y el consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega.
La convocatoria anticipada de elecciones se ha materializado tras varios meses de discrepancias entre los miembros del Gobierno de coalición, que tuvieron que superar el pasado mes de marzo una moción de censura presentada por el PSOE. Aunque la moción no prosperó, sí marcó un alarmante efecto colateral para el Gobierno de Mañueco al quedar en minoría en el Parlamento autonómico con tan sólo 40 escaños de 81. La escisión de la ex de ciudadanos, María Montero, podría marcar un rumbo contrario ante una nueva e hipotética moción de censura, cuyo debate tendrían en la mano los socialistas de Luis Tudanca a partir del próximo mes de marzo.
Óscar Sánchez Muñoz, doctor en Derecho y profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de Valladolid, en conversaciones con COPE, ha destacado que “para muchos castellano-leoneses este adelanto electoral no es una sorpresa”, y recuerda que “es algo sobre lo que se venía hablando en los últimos meses, desde que fracasó la moción de censura presentada por el PSOE, como una posibilidad real como así ha sucedido”.
Nuevo ciclo electoral en Castilla y León
Este movimiento electoralista abre ahora un nuevo periodo en Castilla y León . Porque al contrario de lo que ocurrirá en la Comunidad de Madrid, el adelanto de los comicios anunciado por Mañueco supone la apertura de un nuevo ciclo electoral. Es decir, mientras que Isabel Díaz Ayuso tendrá que volver a refrendar en las urnas su superioridad en el Gobierno regional en las elecciones autonómicas y municipales de mayo de 2023, el Ejecutivo que salga proclamado de las urnas el próximo 13-F enfrentará un mandato de cuatro años según marcan las leyes de Castilla y León.
Según Sánchez Muñoz, que como parlamentario en las Cortes de Castilla y León por el Grupo Socialista entre los años 2003 y 2011 participó como ponente de la reforma del Estatuto de dicha comunidad, ha confirmado que “esta es una de las consecuencias de la reforma del Estatuto de Autonomía que se produjo en el año 2007”.
El experto constitucionalista ha aclarado que “antes de esta reforma, la capacidad de disolución que tenía el presidente de la Junta era limitada, por lo que sólo podía disolver el Parlamento por el tiempo que restara de legislatura”.
La decisión de Mañueco: ¿ultimátum para Moreno Bonilla?
Otro de los gobiernos autonómicos que anda inmerso en cálculos electorales y que todavía se mantiene en la incógnita de si dará o no el paso que sí ha tomado Mañueco es el andaluz. El Ejecutivo del presidente Juanma Moreno Bonilla parece dispuesto a mantener su hoja de ruta y no adelantará las elecciones andaluzas que se celebrarán en junio u octubre, tal y como han defendido en multitud de ocasiones.
Sobre este asunto, Sánchez Muñoz se ha mostrado convencido de que “la situación que vive el Gobierno andaluz comparte ciertas similitudes con el de Castilla y León”, donde “los socios de Gobierno son los mismos” y donde –quizá– pueda existir “la tentación de apuntalar una mayoría en un momento en el que el presidente pueda suponer que un resultado electoral le será favorable”.