Sin micrófonos: Más juezas, pero mandan los jueces
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Nuestra sociedad está llena de techos de cristal para la mujer y la judicatura no es diferente. Ocurre lo mismo que en cualquier profesión. Últimamente, cuando hablamos de la mujer, y en especial si nos referimos a la Justicia, lo hacemos con cierta sensibilidad. Esta semana, el CGPJ publicó un informe titulado “Una perspectiva de género en la Justicia”, en el que destaca que el 53,2% de jueces y magistrados son mujeres, y han dictado o notificado el 53,5% de las sentencias en 2017. Más de la mitad de mujeres aplicando la ley, pero cuando se mira hacia arriba, cuando miramos a los cargos directivos de los principales órganos judiciales, vemos que mandan los jueces, siguen mandando los hombres. Y desde 2013 las mujeres son mayoría.
A día de hoy, sólo una mujer preside un Tribunal Superior de Justicia. Se trata de Pilar de la Oliva, al frente del TSJ de Valencia desde 2010, aunque hubo alguna más, como es el caso de María Eugenia Alegret, Presidenta del TSJ de Cataluña desde 2004 hasta 2010. Y se interpretó que no repitió por “cambio de cromos”. Las mujeres que presiden salas de los Tribunales Superiores de Justicia llegan al 20,7%, en el caso de las presidencias de Audiencia Provinciales al 16,3% y en cuanto a las Secciones rondan el 22% . En el Tribunal Supremo las mujeres representan un 14,5%, y la foto de la apertura del Año Judicial, junto al Rey, es de hombres. Ninguna preside ninguna Sala, como tampoco jamás una mujer ha presidido el Supremo. La primera que llegó al Supremo fue Milagros Calvo, en 2002, a la Sala de lo Social. Tampoco ha habido mujeres al frente de la Audiencia Nacional, aunque el año pasado Concepción Espejel se convirtió en la primera mujer en presidir la Sala de lo Penal.
El informe alude, además, a la carrera fiscal en la que el 64,1% son mujeres y en los cuadros directivos llegan al 36%. Y una mujer, Consuelo Madrigal, estuvo al frente de la Fiscalía General del Estado. Si nos vamos al Tribunal Constitucional, María Emilia Casas fue la primera mujer que lo presidió, entre 2004 y 2011, pero el Tribunal de Garantías no es Poder Judicial.
Casualmente este informe del CGPJ coincide con la polémica que se desató la semana pasada por la ausencia de mujeres en la Comisión del Ministerio de Justicia que asesorará sobre la reforma del Código Penal. Comisión que ha parado hasta que el Ministro nombre a más mujeres expertas en Derecho Penal, que lo hará en los próximos días. Una sección compuesta históricamente por hombres y que reclamaba un cambio. Por cierto, en el Ministerio de Justicia los cargos más altos, las personas que están más cerca de Rafael Catalá, son mujeres: la Secretaria de Estado, Carmen Sánchez Cortés, y la Subsecretaria, Aurea Gómez. Incluso la Directora de Gabinete, Pilar Ponce, con categoría de Directora General.