Cae la cifra de inmigrantes comunitarios a Reino Unido

Se trata de un rato revelador ya que se produce un descenso del 45% respecto al año previo. La cifra de inmigrantes comunitarios netos cae por primera vez por debajo de los 100.000 desde hace 5 años. Desde 2013 no se producía un registro tan bajo y es que fueron 90.000, según la Oficina Nacional de Estadísticas, los ciudadanos que llegaron procedentes de los 27 países en los últimos doce meses a Gran Bretaña. En 2016, primer año que se producía este dato tras el brexit, hasta 165.000 comunitarios decidieron trasladarse a este país.

Desde esta organización señalan al brexit como posible causante de esta caída “el proceso de salida de la UE podría ser un factor en la decisión de las personas de mudarse” aseguraba Nicola White, responsable de estadísticas de esta organización. Aunque bien es cierto matizaba “que la decisión de migrar es complicada y puede estar influida por muchos motivos diferentes”.

De estos inmigrantes europeos, según los datos, menos acudieron por “razones relacionadas con el trabajo” por lo que los analistas consideran que muchos de ellos lo hicieron con un objetivo académico.

Por el contrario, la inmigración neta, la diferencia entre los que llegan y los que abandonan el país, sigue estando por encima del objetivo fijado por el Gobierno en su interés de controlar las fronteras y que han mostrado en los últimos meses como consecuencia del Brexit. En los doce meses anteriores a septiembre de 2017 el dato es de 244.000 personas, muy lejano a los 100.000 que se ha propuesto el Ejecutivo reducir esa cifra.

Varios analistas advierten de que podría ser un síntoma de la incertidumbre sobre el futuro del país en plenas negociaciones con Bruselas y sin un rumbo fijo tras su salida de la UE. Eso unido a la fuerza emergente de otros países del club comunitario.

Sin embargo, alrededor de 285.000 ciudadanos de fuera de la UE llegaron al Reino Unido en el mismo periodo del año. En la otra dirección fueron 80.000 los que dejaron el país., lo que da un aumento neto de 205.000, el más alto en los últimos seis años.