Diez productos de belleza retirados del mercado
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Este viernes conocíamos que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios ordenaba el cese de la comercialización y la inmovilización cautelar de los lotes fabricados a partir de julio de 2017 del producto cosmético +B.O emulsión hidratante pH 5 ante la posible presencia de "Burkholderia cepacia", una bacteria con bajo potencial infeccioso en personas sanas, aunque con posibilidad de presentar riesgos en aquellas con problemas de salud o en circunstancias especiales.
Pero a lo largo de los últimos años hemos conocido otros casos de cosméticos que no cumplen con la normativa y que han sido retirados del mercado. Te contamos algunos:
1.- En 2005 la empresa médica Salus dba ICP de Olivette (Missouri) retiraba voluntariamente los lotes de su champú con acondicionador por estar parte de este producto contaminado en esa ocasión por otra bacteria, la Serratia marcescens -que causaba una enfermedad grave especialmente en las personas inmunodeprimidas.
2.- En 2006 la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ordenaba la retirada del quitaesmaltes "Elisabeth Llorca" comercializado por la empresa Disper Cosmetics, por contener un colorante; el Colour Index 61554, prohibido en España.
3.- El quitaesmaltes fue retirado junto con la crema "CNA", comercializada por Lou Cosmética Aplicada, por tener entre sus componentes betametasona dipropionato, una sustancia que pertenece al grupo de los glucocorticoides, prohibidos en productos cosméticos.
4.- Sonado fue en 2012 cuando conocíamos que Mercadona retiraba -por iniciativa propia- 11 productos cosméticos, cremas y lociones de la marca Deliplus y Solcare, utilizados para hidratar la piel. El problema estaba en el uso simultáneo de dos de sus ingredientes, ya que al combinarse podían generar nitrosamina, una sustancia que ha sido relacionada con la aparición de algunos cánceres. Entre los productos retirados figuraba la popular crema Deliplus con aceite de oliva. Tras la retirada de los 11 cosméticos, Sanidad certificó que su seguridad "se encontraba dentro de los límites razonables".
5.- También en 2012 la empresa Stiefel Farma comunicaba a la propia Agencia Española de Medicamentos la retirada voluntaria de todos los lotes del cosmético Physiogel AI Protect, crema dermoprotectora de uso diario, como medida de precaución, ante la posibilidad de que contuviera nitrosaminas. Al parecer los niveles de concentración de nitrosaminas no representaban riesgos para la salud de los consumidores a corto y medio plazo, sin embargo, su utilización de forma prolongada podría suponer un riesgo potencial.
6- En 2014 la propia Johnson & Johnson anunciaba que eliminaría componentes potencialmente perjudiciales para la salud de sus artículos de cosmética y de higiene para adultos antes de 2015. Entre los componentes se encontraba el formaldehído -catalogado en 2011 como cancerígeno por el Gobierno de EE.UU - o la dioxina 1,4 -relacionada con el cáncer en estudios sobre animales-.
7.- En 2015 surgió la polémica con uno de los productos de moda y que algunos recordarán, el famoso pintalabios mágico marroquí, un cosmético verde que cambiaba de color y procuraba a quien lo usara el tono más adecuado a su tono de piel. La OCU denunciaba entonces que ni era marroquí ni mágico, que era pintalabios normal y corriente y que, además, incumplía la normativa ya que se vendía sin el etiquetado apropiado, sin lista de ingredientes, ni fecha de duración mínima o plazo de uso. Tampoco figuraba el nombre y dirección del fabricante, ni el contenido en gramos, ni el número de lote.
8.- En 2016 la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), ordenaba la retirada del mercado de la crema 'Noni Aloe Vera Reparadora', comercializada por la empresa Kiyoma Siglo XXI, por incluir dos corticoides que además no estaban presentes en el etiquetado; la betametasona y dexametasona que podían dar lugar a dermatomicosis, irritación cutánea, prurito y sequedad de piel.
9.- .- También en 2016 la AEMPS ordenaba retirar del mercado la crema Flor de Lys, por contener glucocorticoides, prohibidos en productos cosméticos. Además, en su etiqueta no figuraban datos obligatorios, como la lista de ingredientes o el nombre y domicilio de los responsables de su comercialización.