Madrid - Publicado el - Actualizado
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Más de 14.000 millones de euros de inversión bloqueada y, parte de ella, directamente fulminada antes siquiera de poder ponerse un ladrillo. Es el balance de conjunto de los apenas dos años de gobiernos municipales de la órbita de Podemos en las principales ciudades a los que se vieron aupados tras las elecciones locales de 2015.
La campaña jaleada contra el ambicioso proyecto cultural que Antonio Banderas quería llevar a cabo en su ciudad natal -iba a jugarse de su bolsillo tres millones de euros- han llevado al actor malagueño a plegar velas y olvidar la iniciativa. Ha sido tras una campaña de ataques que no ha estado dispuesto a aguantar más y en la que han tenido presencia activa los aledaños -y no tan aledaños- ‘podemitas’. El caso es un botón de muestra de esa «política del cambio» que ha hecho sucumbir -por frenados o por directamente dinamitados- proyectos de inversión privada por valor de miles de millones de euros. Y, con ellos, aguadas también las abultadas perspectivas de creación de empleo que llevaban aparejadas.