Esperar para pagar, una opción cada vez menos popular

Esperar para pagar es una opción cada vez menos popular en nuestro mundo acelerado. A pesar de ello y, según un reciente estudio de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (AECOC), 4 de cada 10 usuarios nunca utilizan la auto cajas aunque estén libres y 6 de cada 10 prefieren ser atendidos por un dependiente. Los más impacientes son los jóvenes para quien la atención personal es bastante más prescindible.

Para quienes tienen entre 16 y 27 años el pago automatizado y ágil en la línea de cajas es de lo más valorado. Tan es así que, según refleja el “1er barómetro sobre medios de pago y métodos de autenticación” elaborado por AECOC Shopperview, la mitad de ellos demanda flexibilizar aún más los pagos instalando distintos puntos de cobro en diferentes ubicaciones de la tienda.

Nicolas Peña tiene 28 años y para pagar escoge siempre la opción más rápida, es decir, la cola con menos gente ya sea la del dependiente o la del auto cobro. Para Marina Torres, de 27 años, depende del establecimiento en el que esté comprando ya que, según explica, algunos supermercados no disponen de la posibilidad de pesar la fruta y la verdura en la modalidad de auto caja. Para la ropa opta siempre que puede por el auto cobro.

1 de cada 4 consumidores paga con el móvil

En las tiendas físicas, el 65% de los consumidores paga regularmente en efectivo, pese a que la mitad de los encuestados declara haber reducido su uso. Por su parte, la tarjeta de débito es utilizada de forma habitual por el 60% de los consumidores (un 50% la utiliza más que hace cinco años) y el uso de la tarjeta de crédito se incrementa a mayor edad de la población.

Una tarjeta que el 26 por ciento utiliza directamente desde el móvil, el dato que más aumenta en este mismo estudio con respecto a 2019, un 84 por ciento. Es una forma de pago que se extiende en todas las edades mientras otras crecen sobre todo entre los jóvenes como Nicolás que practica la fórmula “cero efectivo”.

“Los más más jóvenes usan principalmente efectivo. A medida que se van haciendo un poco más mayores lo que predomina es el pago con el móvil. Creemos que también el pago por bizum en tienda física una vez que esté disponible en tienda también lo van a utilizar como ya hacen online. Y el pago vía reloj o vía otros dispositivos todavía tiene un peso pequeño pero son los jóvenes los que más lo utilizan”, explica en COPE la experta en consumo Carlota Usatorre.

La mayoría evita registrar su tarjeta en las compras online

2 de cada 3 consumidores prefieren introducir sus datos bancarios cada vez que compran en un mismo comercio en Internet. El 58 por ciento de los consumidores reconocen que les da miedo compartir sus datos personales y bancarios en las compras online, un temor más acentuado entre los mayores de 60 años.

“La mayor confianza en los pagos online por parte de los más jóvenes les lleva a considerar útil que el navegador recuerde su número de tarjeta. Sin embargo, a medida que aumenta la edad, crece la necesidad de sentirse seguro al realizar pagos online, así como el temor a compartir datos personales y bancarios”, subraya Usatorre.

A cualquier edad, los usuarios valoran tanto la seguridad como la confirmación por parte del comercio de que el pago ha finalizado con éxito. El estudio también señala que 4 de cada 10 consumidores ha tenido que abandonar su compra online por problemas en el proceso de pago.

Entre los principales motivos que dificultan la compra, los consumidores alegan fallos en la doble autenticación o el no disponer de la tarjeta o el móvil en ese momento. “El pago es un proceso determinante que condiciona la experiencia de compra. De hecho, el 15% de los consumidores declara que no compra más por Internet porque el pago les resulta complicado o poco seguro”, concluye Usatorre.