El presidente del Foro Español de la Familia, sobre el 'PIN parental': "Es una ley que nace para ser derogada"

Las asociaciones de familias se rebelan contra la ley de la ministra, Ione Belarra, que veta el 'PIN parental' con el que los padres tienen la última palabra sobre sus hijos. Como hicieran esta semana CONCAPA, la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos, y la plataforma de padres de familia, también desde el Foro Español de la Familia han presentado ya sus aportaciones sobre el anteproyecto de la Ley de Familias, ya que piensan que contiene importantes coherencias conceptuales y jurídicas.

Todos ellos consideran que el anteproyecto discrimina a los más de 10 millones de familias que viven casadas en España y que rebaja el reconocimiento a la institución del matrimonio, además de mermar la protección a las familias numerosas y de ser un retroceso en la garantía de derechos y libertades educativas. Ignacio García Juliá, presidente del Foro Español de la Familia, se ha mostrado contundente y ha dado a conocer sus opiniones en COPE: "Esta no es la manera. Es una ley que nace para ser derogada, porque es que no tiene sentido, no tiene ni pies ni cabeza como tantas otras que se están haciendo, porque ya digo que esta ley fácilmente puede ser recurrida en el Constitucional. Solamente en el apartado de Educación ya es directamente contraria al artículo 27", argumentaba el presidente del Foro Español de la Familia. La organización lamenta que desde el ministerio de Ione Belarra no les haya consultado para elaborar esta ley que consideran propia de un Gobierno ideologizado que persigue un cambio de modelo social, rápido y sin reflexión.

La Ley de Familias

Hace varias semanas, el Consejo de Ministros aprobaba en primera lectura el anteproyecto de la Ley de Familias, una de las grandes promesas del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. Según la ministra Ione Belarra, esta medida se basa en cuarto pilares fundamentales: más protección y apoyo a las familias a la crianza; conciliación; reconocimiento de distintos tipos de familia; y la protección de los derechos de la infancia y la adolescencia. Uno de los elementos más destacados es el que contempla la prohibición del llamado 'PIN Parental', la cual ha estado envuelta en una gran polémica por lo que en sí representa.

A continuación te recordamos las claves de este anteproyecto de ley:

Medidas de conciliación

Derechos de los hogares

"La Ley de Familias acaba con el matrimonio y con las familias numerosas"

El Foro de la Familia ha entregado las aportaciones al Anteproyecto de Ley de Familias al Ministerio de derechos Sociales y Agenda 2030, mediante un informe en el que se evidencian los errores más manifiestos del texto legal y se recogen propuestas para que dicha Ley no desproteja a la institución familiar en España.

"El presente anteproyecto recoge importantes incoherencias conceptuales y jurídicas, supone de facto una rebaja del reconocimiento específico a la institución del matrimonio, merma la protección al colectivo de las familias numerosas y retrocede en la garantía de derechos y libertades familiares en el ámbito educativo.", indica Ignacio García-Juliá, presidente del Foro español de la Familia.

"Existen tantos tipos de familia como familias particulares hay en realidad. La mera clasificación en unos “tipos” cerrados ya evidencia, inevitablemente, un sesgo subjetivo, pues existirían infinitos ejes de categorización. El mero hecho de establecer una clasificación taxativa teniendo en cuenta unos criterios y excluyendo otros es, por tanto, un ejercicio de subjetividad", señala el presidente.

Si bien es cierto que es necesario aumentar la protección y reconocimiento jurídico de las familias no basadas en el matrimonio, consideramos que no ha de hacerse a costa de eliminar la protección singular de las familias basadas en el matrimonio.

El matrimonio entre hombre y mujer, sin perjuicio de cualesquiera otras uniones o formas de convivencia, supone una realidad singular consistente en el vínculo permanente en el tiempo entre dos personas de sexo complementario, las cuales se comprometen entre sí y ante la sociedad en un proyecto vital en común, del que surge el entorno ecológico idóneo para el surgimiento, crianza y desarrollo de nuevas vidas. Por ello, equiparar en la práctica cualquier otra realidad a esta

institución concreta, supone de facto una merma de la protección singular que la misma merece -siendo el interés superior del menor la base jurídica de esta protección singular. El art. 4.2.g) del Anteproyecto afirma que “se facilitará a los miembros de las familias el desempeño de sus responsabilidades y el ejercicio de sus derechos”, en clara contraposición a la merma de la patria potestad y de la libertad de los padres amparada en el art. 27.3 de la CE que supone el artículo 24.3 del texto legal que nos ocupa: “Los progenitores o adultos responsables no podrán limitar o impedir el acceso de niñas, niños y adolescentes a la información y su participación en actividades de sensibilización y difusión de la diversidad familiar”.

De la interpretación subjetiva de la diversidad que hace el legislador en el presente Anteproyecto, contraria a la libertad ideológica recogida en el art. 16.1 CE, sin duda pueden surgir conflictos de índole moral que contravendrían a la jurisprudencia del Tribunal Supremo en sus sentencias de fecha 11 de febrero de 2009. “El Anteproyecto elimina la protección y apoyo específico a las familias numerosas, para incluirlas en un “fondo de saco” junto con otros colectivos de familias con características y necesidades no necesariamente análogas ni compartidas. Exigimos que se mantenga tanto la condición como el título propio de familias numerosas, sin perjuicio de la creación de cualesquiera otros títulos para otros colectivos de familias distintos a las numerosas, como de hecho sí hace el Anteproyecto en el caso de las monoparentales”, añadió el presidente. Además de lo anterior, el Foro plantea otras medidas a incluir en el texto legal, como la supresión del impuesto de donaciones y medidas concretas para aumentar la conciliación laboral y familiar, entre otras.