Tiene menos de dos años y ya le preocupa el qué dirán
Un estudio revela que a los bebés les preocupa su reputación incluso antes de que empiecen a hablar
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
¿Puede un bebé de tan solo 2 años ser consciente de que alguien le mira y evalúa? Sí.
Los pequeños son conscientes de que pueden ser juzgados por otros y eso les hace sensibles a las opiniones de los demás. Sara Valencia Botto es la autora de este estudio que publica la revista científica 'Developmental Psychology' y edita la Asociación Estadounidense de Psicología: “Hemos demostrado que a los 24 meses de edad, los niños no solo son conscientes de que otras personas pueden estar evaluándolos, sino que alterarán su comportamiento para buscar una respuesta positiva”
Informes anteriores habían situado este comportamiento entre los 4 o 5 años. Sin embargo, la investigación de un equipo de la Universidad de Emory en EEUU revela que la preocupación por la reputación tiene lugar antes.
"Nuestra preocupación por la reputación es algo que nos define como humanos. Creemos que nuestros hallazgos nos acercan a la comprensión de cuándo y cómo nos volvemos menos o más sensibles a la evaluación de otras personas, y refuerza la idea de que los niños suelen ser más inteligentes de lo que podríamos pensar", señala Botto.
144 bebés -de entre 14 y 24 meses-, un robot de juguete controlado a distancia y cuatro experimentos.
Los investigadores enseñaron a usar el robot a los pequeños y pudieron comprobar cómo reaccionaban y accionaban el botón de ese juguete en función de si se sentían observados o no. Y, además de no hallar diferencias entre ambos sexos, comprobaron que en cada uno de los experimentos los niños muy pequeños están más atentos a su entorno y las respuestas de los demás de lo que se pensaba anteriormente.
Philippe Rochat, otro de los investigadores manifiesta que "este es un hito importante en nuestra comprensión de la cognición social humana y el desarrollo. Se necesita investigar más para examinar si incluso los niños más pequeños, los menores de 14 meses, podrían ser sensibles a los juicios de los demás".
Botto sigue de cerca a los niños de 14 a 24 meses involucrados en el estudio publicado. Su intención es comprobar si las diferencias individuales, que mostraron en los experimentos, se mantienen cuando pasa el tiempo y cumplen cuatro o cinco años.
"Es normal y necesario en cierta medida preocuparse por nuestra imagen con los demás", dice Botto. "Pero a algunas personas les importa tanto que sufren de ansiedad social, mientras que a otras les importa tan poco que no es óptimo en una sociedad donde la cooperación es esencial", concluye.