Buena evolución de Román y Jesús Arruga tendrá que pasar por el quirófano

El valenciano Román fue cogido durante la faena de muleta a su segundo toro, de la ganadería de Luis Algarra, el cual le infirió una cornada en el tercio medio de la cara posterior de la pierna derecha, con una trayectoria ascendente de 15 centímetros, que causó destrozos en el gemelo interno, según el parte médico firmado por el doctor Máximo García Padrós.

El cirujano jefe de la Monumental madrileña fue el encargado de hacerle las primeras curas en la clínica de La Fraternidad, donde ha pasó su primera noche "tranquilo, con las molestias propias de este tipo de percances, pero sin fiebre y sin mayores sobresaltos", ha informado a Efe el galeno.

"Mañana empezaremos a mover los drenajes y veremos si prosigue esta buena evolución, que confío que sí; además, conociendo como conozco al torero y la fortaleza que tiene en todos los sentidos, seguro que dentro de poco ya está en su casa y, en menos que nos lo esperemos, también estará toreando", ha apostillado Padrós.

Sobre el subalterno Jesús Arruga, que sufrió una aparatosa caída a la salida de un par de banderillas en el tercer toro, no llegan buenas noticias, pues el estudio radiológico al que ha sido sometido este domingo ha confirmado los peores presagios: fractura del hombro derecho por la que tendrá que pasar por el quirófano.

"En la radiografía se observa perfectamente que tiene la cabeza del húmero totalmente estallada, una fractura muy fea de la que deberá ser intervenido este mismo martes", confirma también Padrós.

Por su parte, Gonzalo Caballero, que también fue volteado en el saludo de capote al segundo toro de la función, sufrió un puntazo con hematoma en el gemelo izquierdo y una posible lesión en el menisco interno de su rodilla derecha, aunque el alcance real de esta dolencia se conocerá en los próximos días, tras el resultado de la resonancia a la que será sometido.