El sencillo gesto en tu rutina diaria que puede hacer que aumente tu rendimiento si haces deporte regular
Si haces deporte con regularidad o te dedicas a él de forma profesional, es posible que te interese conocer este sencillo gesto que podría contribuir a un mejor progreso deportivo
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Si haces deporte con regularidad, ya sea por cuidar tu salud o con objetivos profesionales, es posible que sepas la importancia que tienen la alimentación y el sueño. Se trata de algo que hacen, especialmente, los atletas de alto rendimiento. No solo mantienen una alimentación adecuada que les ayude a conseguir los nutrientes y macronutrientes necesarios para rendir incluso en los entrenamientos más duros, sino que el sueño también tiene un papel fundamental.
Hay quienes creen que, tal vez, un adecuado descanso no tenga mucho que ver con el rendimiento durante los entrenamientos. No obstante, está más que demostrado que dormir al menos ocho horas, permite que el cuerpo y los músculos descansen, y por ello nos permitirá llegar llenos de energía al entrenamiento siguiente. Una falta de sueño o un sueño insuficiente, por lo tanto, puede reducir significativamente nuestro rendimiento.
El sencillo gesto de tu rutina diaria que puede hacer que aumente tu rendimiento deportivo
Si ya hemos venido hablando de la importancia del descanso, somos conscientes de que no siempre podemos dormir ocho horas. Ya sea por falta de tiempo o por dificultades para conciliar el sueño, muchas veces no conseguimos descansar el tiempo recomendado. Así las cosas, la siesta podría ser nuestro gran aliado para contrarrestar la falta de horas de sueño nocturno.
De hecho, cuando un deportista duerme en torno a cuatro horas, 30 minutos de siesta son suficientes para reducir el cansancio y la somnolencia, además de aumentar el estado de alerta y nuestras capacidades motoras. Con solo 20 minutos de siesta, los estudios han descubierto que puede haber mejoras significativas en la recuperación tras un esfuerzo, así como en el rendimiento cognitivo. Todos estos beneficios aumentan si la siesta es superior a 90 minutos.
Somos conscientes de que hay una serie de factores fundamentales, como el auténtico descanso nocturno y la alimentación, que son clave en el progreso deportivo. Ahora bien, si este último no es óptimo, ¿por qué no plantearse la posibilidad de incorporar una pequeña siesta en nuestra rutina?
Venimos hablando de siestas, pero es posible que en más de una ocasión te hayas preguntado: ¿cuánto debe durar? Una reciente investigación indica que dormir durante 30 minutos o más le proporciona al cuerpo tiempo suficiente para poder entrar en un sueño profundo. Por lo que echarse una muy larga puede hacer que tengamos sueño durante una hora, aproximadamente, y que entremos en un proceso llamado 'inercia del sueño'.
Si tomamos en cuenta todas estas consideraciones, la mejor duración para una siesta se encuentra en un punto intermedio, es decir, tiene que ser lo bastante larga como para ser reparadora, pero no tan larga como para producirnos más sueño. De hecho, las siestas que duran entre 10 y 20 minutos son las que bridan mayores beneficios del sueño sin que aparezcan los efectos de la somnolencia.
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