Ana del Paso: “La historia del periodismo no se puede contar sin las mujeres españolas”
Ana del Paso, periodista y autora de ‘Reporteras españolas, testigos de guerra’ repasa en ‘La Linterna’ la importancia de las reporteras de guerra españolas en la historia de la profesión
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Cuando Ana del Paso volvió de Washington, descubrió que el trabajo de las reporteras de guerra españolas no había sido estudiado seria y profundamente desde una perspectiva académica. Ella, que había compartido horas de trabajo y penurias en conflictos con muchas de ellas decidió dedicar su tesis doctoral al trabajo de las reporteras españolas. Ahora, la periodista presenta en ‘La Linterna’ su obra ‘Reporteras españolas, testigos de guerra’ con 34 testimonios de periodistas españolas.
Carmen de Burgos, Teresa de Escoriaza, Josefina Carabias o Emilia Pardo Bazán, entre otras, forman parte de este libro. Mujeres que escribieron en una “época de corsé” y que se movieron mejor o igual que otros hombres para lograr grandes historias y entrevistas. “Sin sus aportaciones no nos habríamos enterado de muchas cosas. Sofía Casanova, por ejemplo, era la única periodista española en Stalingrado cuando estalló la revolución bolchevique” cuenta Ana.
Sobre la corresponsalía de guerra, la escritora afirma que no todo el mundo puede soportar las situaciones en las que puede verse envuelto el reportero. “La periodista que hace información internacional debe hacer todo tipo de información” sostiene la autora. Para ella, la información internacional no interesa en nuestro país, la situación se complica para las mujeres porque se trata de un ambiente machista que no reconoce el papel de las reporteras. “Las mujeres que hemos estado ahí hemos insistido mucho y hemos tenido suerte” afirma.
La corresponsal de Cadena Cope en Marruecos, Beatriz Mesa, aparece en la obra y ha querido entrar en la entrevista desde Rabat. Mesa coincide con Ana en que la corresponsalía y el periodismo de guerra son territorios “monopolizados por el hombre” aunque “las cosas han cambiado bastante”.
Ambas periodistas coinciden en que la objetividad en el reportero es relativa, por lo que se ha de buscar la “honestidad” y la “humildad”. “la primera víctima de una guerra es la mentira” recuerdan. Con esta moraleja incluida en el libro, mantienen que hay que ser testigo de lo que se ve y además diferenciar lo bueno de lo malo. Especialmente hoy en día, concluye Ana del paso, “los reporteros son necesarios para contrarrestar la propaganda de las redes sociales”.