El Mercado del Sur de Gijón, "con futuro" a pesar de frustrarse la reforma de la segunda planta

El Mercado del Sur tiene futuro. En este jueves en el que en hemos abordado, en la radio, cómo pueden los mercados tradicionales renovarse para evitar su cierre y competir con los supermercados y grandes superficies, COPE Gijón ha visitado la icónica plaza de abastos cubierta situada en la plaza del Seis de Agosto para palpar el ambiente entre tenderos y clientes.

Sonia lleva 15 años al frente de un colmado y nos ha contado que se diferencia del supermercado "trabajando con elaboradores pequeños o queserías pequeñas y ofrecemos productos que no están tan presentes en el súper". Añade, además, el trato cercano al cliente: "Intentamos dar una atención personalizada. Conocemos a nuestros clientes porque son habituales y cuando llegan, ya sabemos qué queso les gusta o el tipo de faba y embutido que quieren", asegura.

Plan para crear una zona de ocio y hostelera

Aunque ve futuro en el Mercado, Sonia lamenta que se hubiese frustrado el espacio de ocio y gastronomía que un promotor privado había proyectado en la segunda planta del edificio, prácticamente sin puestos: "Hubiese sido interesante", reconoce. El plan, que se fijaba en el modelo del San Miguel madrileño y costaba algo más de un millón de euros, preveía captar unos 8.000 visitantes semanales. Pero la empresa interesada se echó, finalmente, atrás.

En el paseo entre charcuterías, floristerías o carnicerías, nos encontramos con Natalia, una de las compradoras jóvenes que acuden "dos o tres días a la semana" al Mercado del Sur. No piensa perder la costumbre de acudir al mercado tradicional porque, según cuenta en COPE, "la relación calidad-precio es mucho mejor y la atención al público es diferente".

"Yo vengo siempre a la pescadería, es mi pescadera de confianza y me vende pescado de confianza", zanja.

Mercado del Sur

El Mercado del Sur es el único de los mercados tradicionales de Gijón que se ha mantenido en pie con carácter comercial, tras la conversión de la antigua Pescadería Municipal en un edificio administrativo y el derribo del Mercado Jovellanos -más conocido como Mercado de Hierro- en 1937 (había sido construido en 1876, en lo que ahora es la plaza del Parchís).

La actual plaza de abastos cubierta se inauguró en 1889, por iniciativa privada, para venderse, en ella, productos agrícolas. Cuando se acercaba al siglo de vida, el mercado estaba muy deteriorado y en 1984, se restauró la fachada. A finales de los años 90, el edificio se renovó íntegramente y reabrió sus puertas, tal y como lo conocemos hoy, en 2001.