Garrido busca a toda prisa un consejero para el Tenerife

Alba Aula Méndez se convirtió este lunes en la primera dimisión de la era José Miguel Garrido en el CD Tenerife. Con un escueto comunicado, publicado en sus redes sociales, la entidad blanquiazul anunciaba la dimisión de la secretaria del consejo de administración “por motivos personales”. En el texto, el club le agradece “el gran trabajo completado desde el 14 de diciembre de 2022 hasta la fecha y le desea lo mejor en lo personal y en lo profesional”.   

La realidad es que la reconocida notaria llevaba tiempo madurando la posibilidad de abandonar su cargo. Se va con discreción, misma fórmula que ha utilizado en sus 22 meses como consejera. Más allá de sus apariciones en las juntas, poco sabemos de su actividad no remunerada en el Tenerife. Pero resulta lógico pensar que no se sintiera cómoda con los últimos meses de gestión.

La presentación de una querella por parte de un inversor británico contra Garrido por presunta estafa y falsificación documental, asunto que afectaría también a un notario de reconocido prestigio en la capital, podría haber sido el detonante definitivo para que la dimisión quedara registrada en las oficinas del Heliodoro Rodríguez López. Alba Aula ha declinado realizar declaraciones para no colaborar en un contexto ya crispado en torno al accionariado y se remite al comunicado del club.

Queda el consejo de administración en el número mínimo de miembros que podría tener: cinco. Una nueva dimisión sumiría al órgano rector del CD Tenerife en una situación caótica. Samuel Gómez Abril, cuota de Amid Achi, también ha valorado la posibilidad de dimitir desde hace meses. Pero no ha terminado de dar el paso.

La intención del máximo accionista es reemplazar a Alba Aula con celeridad para evitar sustos. Será alguien de su confianza, cuestión que considera necesaria en un momento de serias dudas y hasta de oposición interna a su proyecto. La junta del mes de diciembre servirá para ratificar el nombramiento.