La muerte de Carlos Cubillas no fue una pelea: "Fue una agresión brutal"
El juez envía a prisión comunicada y sin fianza a los dos jóvenes detenidos ante la gravedad del suceso y por apreciar riesgo de fuga
Santander - Publicado el - Actualizado
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Los dos jóvenes de Boo de Piélagos de 19 y 20 años investigados por la muerte de Carlos Cubillas, de 21 y vecino de Polanco, este pasado sábado agredieron de forma “brutal y conjunta a la víctima que tuvo poca, por no decir ninguna, posibilidad de defensa frente a sus dos atacantes", según el auto del juez
El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Santander, tras tomar declaración a ambos investigados -en el marco de unas diligencias abiertas por homicidio- los ha enviado a prisión comunicada y sin fianza por esta "brutal agresión".
Hechos por los que el magistrado ha acordado imponerles prisión comunicada y sin fianza ya que existen indicios de autoría del delito y al concurrir también riesgo de fuga.
En la resolución, alude a dos testigos que vieron cómo los implicados "arrastran a la víctima por la fuerza" hasta el apeadero de la FEVE en Boo de Piélagos, donde comenzaron a pegarle "puñetazos en la zona de la espalda y de los costados".
Después, añade el juez, le llevaron hasta la valla negra de la estación y le tiraron al suelo, donde le siguieron propinando patadas "por todo el cuerpo, cabeza incluida", hasta darle una "tan fuerte que acaba por arrojarle a las vías del tren, donde el joven finalmente fallece".
TRES REQUISITOS
En su auto, el magistrado justifica la medida privativa de libertad porque concurren tres requisitos exigidos por la ley para el ingreso en prisión provisional: pena superior a dos años, indicios de la autoría y riesgo de fuga.
Así, consta en la causa la existencia de hechos constitutivos de un delito contra la vida, con una pena en abstracto de hasta quince años de prisión, por lo que se supera el requisito de que el delito esté penado con dos años o más de encarcelamiento.
NO FUE UNA PELEA MUTUA, SINO UNA AGRESIÓN CONCERTADA
El magistrado pone de manifiesto en el auto que la "única lesión" que tiene uno de los investigados se encuentra en los nudillos, "derivada de los golpes que le propinó a la víctima".
Por ello, concluye, "difícilmente podemos hablar de una pelea mutua que acabara en un resultado no esperado, sino en una agresión concertada de dos personas contra una sola".
El hecho se atribuye a ambos, "independientemente de quién de los dos materialmente propinara la patada o ejecutara el acto que causó la muerte", y es que "la coautoría no requiere que cada uno de los coautores ejecute en su integridad el verbo nuclear de la acción", sino que se aprecia cuando existe "un acuerdo respecto de aquello que se va a ejecutar".
UNO DE LOS INVESTIGADOS RECURRIRÁ EL AUTO DE PRISIÓN
El auto no es firme y contra el mismo cabe interponer recurso de reforma y también de apelación, algo que ya ha anunciado la abogada de uno de los jóvenes.Entre otras cuestiones, la abogada entiende que hay contradicciones en las declaraciones de los testigos.
NECESITARAN AYUDA PSICOLÓGICA
Los psicólogos consultados por la cadena COPE en Cantabria coinciden en señalar el momento duro y difícil tanto para la familia de Carlos Cubillas, víctima de la agresión, como para las de los agresores. "Ellas también tienen que pasar un duelo para entender cómo sus hijos se han visto involucrados en algo así" asegura Isabel Diego.
La familia de Carlos, "a la que sería necesario acompañar durante un tiempo", esta ahora en la primera fase del duelo. Ese momento de shock en el "que no te terminas de creer lo sucedido". A esta etapa, que puede prolongarse durante unos días, seguirá otra dificil que es la de culparse por lo sucedido. Se preguntarán si de alguna manera podrían haber hecho algo para evitar lo ocurrido.