Unión inédita de la oposición en A Coruña contra la “chafallada” de tramitación de la Agenda Urbana 2030
PP, Marea y BNG denuncian la improvisación en la gestión de una estrategia de ciudad en la que se ha excluido al resto de grupos
Coruña - Publicado el - Actualizado
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Es como si el Plan General de Ordenación Municipal o los presupuestos se aprobasen sin que la oposición tuviese siquiera la opción de votarlos. Así comparaban representantes de PP, Marea y BNG en A Coruña la tramitación que ha hecho el gobierno socialista de Inés Rey de la Agenda Urbana A Coruña 2030 (AUAC 2030) en la ciudad herculina.
Esta exclusión ha llevado a que, por primera vez, representantes de PP, Marea Atlántica y BNG hayan comparecido ante los medios, en una nunca vista rueda de prensa conjunta celebrada este lunes en el Hall del Palacio Municipal de María Pita. Tres ediles han aparcado sus diferencias para expresar su rechazo unánime. “Chafallada”, dijo la nacionalista Avia Veira. “Pobre y falto de ambición”, fueron las palabras de María García, de la Marea. “Se hurta el debate a los grupos del concello y a la ciudadanía que representan”, según el popular Roberto Rodríguez.
APROBACIÓN EN SOLITARIO
La razón de este malestar es que el gobierno herculino ha optado por aprobar esta Agenda Urbana A Coruña 2030 y el Plan Estratégico de Acción Local que la desarollará en junta de gobierno, en vez de someterla a pleno. Así, solo fueron necesarios los votos del ejecutivo socialista en minoría para que echase a andar este proyecto de ciudad, que ahora se remite al Ministerio de Transportes.
La tramitación, a juicio los tres grupos, se hace de forma atropellada, deficiente y tardía. Recuerdan que este martes, día 13, termina el plazo para enviar el documento elaborado por una consultora al ejecutivo central y así optar a que sea el gobierno quien financie su coste, que ronda los 300.000 euros. Al no someterlo a pleno, temen que se pueda perder esta subvención.
ADMITIERON DESCONOCER LOS PLAZOS
“Es improvisación pura”, señaló la edil nacionalista, que recordó que el concello los citó la semana pasada a una reunión en la que reconocieron que “no sabían que la fecha límite era el 13 de septiembre”. “Se nos dijo literalmente que iban a convocar un pleno el lunes o el martes”, dijo el popular Roberto Rodríguez, que entiende que quizás “quisieron ahorrarse un bochorno” al saltarse la aprobación plenaria. “Lo grave de esto es la improvisación”, señala María García, que se pregunta si, al margen de la “política espectáculo” el gobierno coruñés “está a lo que tiene que estar”.
Los grupos consideran esta atropellada tramitación como algo especialmente sangrante cuando la agenda urbana empezó a planificarse en A Coruña en 2019 como proyecto piloto. Además, entienden que el concello estaba no solo moral, sino legalmente obligado a una tramitación conjunta porque a finales de 2020 habían acordado en un pleno que se conformaría una comisión conjunta entre los distintos partidos para elaborar dicho plan.
No hubo más noticias hasta el encuentro de la semana pasada, tras el que se remitió a los grupos el documento de 1300 páginas que se va a enviar al ministerio de Transportes. Entre aquel pleno y la reunión de septiembre, el coordinador general del Ayuntamiento se fue, al asumir un nuevo puesto en el Ministerio de Educación y el concejal de Urbanismo, área de la que depende esta estrategia, presentó su dimisión.
EL PSOE DEFIENDE SU MODO DE ACTUAR
Mientras, el gobierno local ha defendido como completamente válida la aprobación en solitario de lo que definen como “hoja de ruta que marcará el futuro diseño de la ciudad”. En un comunicado, aseguran que la luz verde en junta de gobierno es “un paso más, consensuado con el ministerio” y “un trámite exigido desde el Gobierno Central” que, según alegan, “no establece que el documento tenga que ir a pleno”.
Desde el ejecutivo socialista califican la Agenda como un “documento vivo” que “se adaptará en cada momento a las circunstancias económicas y sociales y a las necesidades de la ciudad”. Entienden que la participación ya ha venido a través de “múltiples actividades” en verano y reuniones “en todos los centros cívicos” con distintos colectivos para recabar e incorporar su opinión.
APELACIÓN AL “MÁXIMO CONSENSO POSIBLE”
Según este comunicado, el ejecutivo convocará a todos los grupos a la “correspondente comisión” para poder obtener sus aportaciones y avanzan que someterán a aprobación plenaria esta Agenda Urbana 2030 como “proyecto común de ciudad” con “el máximo consenso posible”. No obstante, los grupos ya adelantaron que, aunque se vaya a celebrar un pleno, será después de mandar la estrategia al gobierno central. Por ello, entienden que no podrán introducir ninguna mejora o cambio en los objetivos o los plazos, cuestiones clave en la definición de las futuras políticas que salgan de este documento.
La aprobación de la Agenda Urbana 2030 permitirá al gobierno coruñés acudir a nuevas convocatorias de fondos europeos. Además, comprometerá las políticas y las estrategias de, como mínimo, las tres próximas corporaciones de A Coruña, en base a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la ONU en 2015.