Esto es lo que ocurre cuando se va la luz en casa de un enfermo eletrodependiente: "Estaba desesperado"
El temporal Herminia dejó casi un día entero sin suministro al barrio de Conxo en Santiago. En uno de los hogares afectados vive María Teresa, que necesita una máquina para alimentarse
Santiago - Publicado el - Actualizado
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Un corte de luz es un quebradero de cabeza en cualquier hogar: cocinar, lavar la ropa, limpiar, asearnos, nos parecen casi misión imposible cuando se ha interrumpido el suministro, pero en casa de José María y María Teresa puede ser un problema vital. Ella está desde hace más de 30 años encamada y con una sonda que le suministra directamente la alimentación al estómago, con una máquina que funciona con energía eléctrica. Entre el domingo y el lunes, parte del barrio compostelano de Conxo estuvo casi 20 horas sin luz, un tiempo que se hizo eterno a José María. "Me desesperaba porque ya no sabía a quién llamar", cuenta: "el 112 ni caso, que estaban muy ocupados...pero miren que... Ni caso, ni caso...a donde fui llamado... Del hospital me ofrecieron mandarme una ambulancia y llevarla para un cubículo de urgencias solo para administrarle la medicación, pero no".
Para José María no era opción llevarla al hospital, porque temía que la salud frágil de su mujer se complicase todavía más, así que mientras esperaba que llegase una solución intentó incluso alimentarla con una jeringuilla, cruzando los dedos para que no surgiese alguna complicación. "No le puedo dar seguido, porque aquí va por minutos, entonces dije... pues voy a hacer lo mismo, y cuando pasaban diez minutos, otra vez, pero claro, tenía miedo de que hubiera una aspiración". De eso le advirtieron también en una de las llamadas que hizo al hospital: "no siga con eso, no lo haga, pare".
La declaración de electrodependiente no sirve para nada
Esposo de una enferma gran dependiente
La familia de María Teresa ha optado por rascarse el bolsillo y comprar un generador a gasolina, por si la situación del domingo vuelve a repetirse. Porque aunque esta fue la vez más duró el corte, José María recuerda que al menos en cuatro ocasiones se han quedado sin luz al inundarse el transformador que hay cerca de casa. Y aunque Naturgy dio luz verde hace meses a la declaración de electrodependiente para María Teresa, el documento se ha revelado como papel mojado. "A mi mujer no le valió para nada ese papel, porque Naturgy no movió un dedo", insiste.
Este trámite garantizado por ley desde hace años está pensado para que ninguna persona enferma que dependa de una máquina pueda sufrir un corte de luz por impago, pero no garantiza nada más.
"Ella haría lo mismo o más"
Las respuestas oficiales son rácanas a ojos de alguien que lleva casi media vida dedicada a cuidar a su pareja. María Teresa se quedó postrada en la cama tras una operación que iba a intentar acabar con uno de los tumores que sufría desde joven. La familia se mudó a Santiago "porque aquí estaban sus médicos", la casa se adaptó a ella, con la cama articulada presidiendo el salón, donde está todo a mano para atenderla. "Lo tengo que llevar bien, no tengo otra solución. Desde antes de casarnos ya nos dijimos que estaríamos siempre uno para cuidar al otro... y a mi me tocó". José María está seguro de que "ella haría lo mismo o más que yo". Recuerda que hasta cuando eran jóvenes, los amigos les llamaban "empalagosos".Todo porque "siempre nos gustó estar juntos"