UU.AA pide 35 millones de la Xunta para sectores ganaderos “marginados” por ayudas estatales

El secretario general del sindicato Unións Agrarias (UU.AA), Roberto García, le ha exigido este lunes al “gobierno Rueda” que cumpla el compromiso de la Xunta de Galicia de completar las ayudas estatales al sector agroganadero gallego, con especial atención a los productores de carne de vacuno, conejos y pollos, “marginados” en la convocatoria del Gobierno.

En una rueda de prensa en Lugo, Roberto García, precisó que el “compromiso” del hasta ahora presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, había sido complementar esas ayudas del Gobierno de España y de Europa con una aportación equivalente al 50% de las mismas, de modo que, si el Ministerio va a invertir “72 millones” en el sector primario gallego, a la administración autonómica le tocarían “unos 35 millones”.

“Hemos calculado que la aportación de Bruselas y del Gobierno”, con los fondos destinados a superar la actual crisis de precios, “suma 72 millones de euros” para el sector primario gallego, explica Roberto García. Sin embargo, “aunque la partida puede parecer razonable”, no lo es tanto “el reparto que ese hace” de esas ayudas.

REPARTO DESIGUAL

En ese sentido, recordó que los ganaderos de leche percibirán una ayuda de 210 euros por vaca, mientras que los productores de carne tendrán que conformarse solo con 60 euros por cabeza de ganado. Solo dos millones de euros, en total, llegarán a las granjas de pollos, mientras que las de conejos recibirán apenas una cantidad simbólica, 200.000 euros a repartir entre todas.

Por otra parte, en el reparto de esas ayudas tampoco se hace una diferenciación por comunidades autónomas, de modo que los ganaderos de leche gallegos percibirán las mismas cantidades que los de otras regiones, a pesar de que el precio en origen es históricamente más bajo en las granjas de Galicia.

García aclaró que, a la hora de repartir ese dinero, también habría que tener en cuenta que “hay hasta 8 céntimos de euros de diferencia por litro” entregado en función del volumen de las granjas y de la industria que les compra su producción.

Habida cuenta de que la cantidad arbitrada por el Ministerio no puede ser complementada directamente por la Xunta de Galicia, la fórmula que propone el sindicato, para que esos 35 millones de euros que reclama lleguen a los sectores “discriminados” por las ayudas estatales, pasa por subvenciones de “mínimos” que tendrían que quedar reguladas mediante órdenes “específicas” por parte del Gobierno gallego.

Ayudas arbitradas de un “modo paralelo” que, en todo caso, no podrían superar los 35.000 euros por explotación.