Yacimientos de La Mariña de Lugo conservan vestigios de oro y plata pero "no nos van a sacar de muchos problemas"

La Mariña de Lugo tiene un interesante pasado aurífero del que aún quedan vestigios a día de hoy. Esto significa que si nos ponemos a buscar alguna escama de oro encontramos en la zona. Es la herencia del pasado minero de antiguas generaciones.  

Barreiros, Riotorto, Valadouro y Xove son los puntos donde, a día de hoy, se puede encontrar el metal precioso - pero poco porque esto no es El Dorado.

11 GRAMOS POR TONELA

Tras un estudio geológico realizado por Mariña Patrimonio y el geólogo Fran Canosa se calcula que hay unos 11 gramos por tonelada en la zona de Barreiros, en el yacimiento de Coira. "De los estudiados es el que más tiene", señala el experto.

Según Fran Canosa "en el mundo minero en que nos movemos a día de hoy eso podría ser rentable pero, claro, hay que tener en cuenta una cosa, ¿qué volumen, qué superficie de territorio tiene esa concentración?" 

La pena es que si pusiéramos las máquinas a excavar la extracción no daría para mucho porque la extensión del espacio en que aparece el recurso es pequeña.

Así que pese a la ilusión que genera encontrar el preciado metal o convertirse de repente en un magnate del oro, mejor que nadie deje el trabajo para comprarse una batea porque de ésta no nos hacemos ricos: "pues me temo que no, me temo que vamos a tener que buscar otro tipo de actividad económica porque con eso no creo que nos vaya a sacar de muchos problemas".

HAY ORO PERO NO PARA HACERSE RICO

Algo más que sacamos en claro de este estudio es que sí tenemos bastante plata. No tiene la misma cotización en el mercado que el oro pero en la zona hay hasta 760 gramos de plata por tonelada en el pueblo de Riotorto. Para Canosa es una cantidad destacada pues "estamos hablando de casi un kilo de plata por una tonelada de material, es un valor bastante significativo, claro, teniendo en cuenta que la plata no tiene el valor del oro pero estamos hablando de un metal con cierto valor también".

A pesar de que no hemos descubierto que tenemos un filón oculto, el estudio realizado es muy interesante porque aporta datos sobre nuestros antepasados los cuáles por cierto eran muy buenos prospectores y, pese a no disponer de la tecnología adecuada, ya sabían dónde buscar y cómo hacer bien las cosas.

en el pasado sabían cómo buscar

Fran Canosa indica que la parte más importante de la historia es "entender cómo se movía en aquel momento la búsqueda de este metal, las explotaciones que hicieron, porque algunas de las que visitamos son dignas de visitar porque se ven las trincheras que realizaron con las excavacones correspondientes, siguiendo el filón". Apunta que tenemos que quedarnos con la parte del patrimonio o histórica que supuso la extracción del metal a lo largo de diferentes puntos del territorio. 

El estudio geológico realizado en La Mariña siguiendo la senda del oro se extendió aproximadamente a lo largo de cinco meses, fue laborioso por lo que implica la preparación de las muestras, establecer las zonas idóneas donde buscar, recogida de restos, procesos de triturado, cribado, "un proceso un tanto complejo".