Las peores horas de Benítez como entrenador del Celta
La afición manifestó su descontento en el último partido coreando el "Benítez vete ya" y son muchos los que piden que sea destituido y que Claudio Giráldez se haga cargo del primer
Vigo - Publicado el - Actualizado
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La temporada del Celta de Vigo vuelve a estar muy por debajo de lo esperado. Un año más, a pesar de lo especial de celebrar el Centenario, el primer equipo pelea por eludir los puestos de descenso, algo que viene siendo habitual en los últimos años.
El conjunto celeste viene de cerrar una pésima semana, en la que perdió los tres partidos disputados, dos ante la Real Sociedad y uno ante el Girona. La eliminación copera, por el mal encuentro realizado por el cuadro gallego, ha generado mucho malestar entre los aficionados, que hartos de lo que ven esta campaña, entonaron el "Benítez vete ya" ante el Girona el pasado domingo.
Son muchos los seguidores celestes que piden a gritos la destitución de Rafa Benítez. Sin embargo, por la elevada ficha del entrenador y su cuerpo técnico, y según desveló COPE, supondría hipotecar el límite salarial del club para, por lo menos, los mercados de las dos próximas temporadas, y el Celta no tendría opción de acudir al mercado en condiciones de incorporar refuerzos.
BENÍTEZ DEFIENDE SU GESTIÓN
Rafa Benítez fue cuestionado, tras la derrota ante el equipo catalán, por los silbidos que hacia su persona había proferido gran parte d ela afición que se dio cita en Balaidos. Lejos de asumir los errores propios o los del equipo, el experimentado entrenador madrileño defendió que el pasado verano firmó un contrato por tres años y que, según sus propias palabras, "los proyectos son proyectos y un entrenador profesional que hace su trabajo y trabaja doce horas diarias quiere que su proyecto salga bien".
El técnico defiende las estadísticas del equipo, a pesar de los resultados, y defiende que siempre es competitivo. Un mensaje que ya no cala entre el aficionado. Su principal valedora en el club sigue siendo la presidenta, Marián Mouriño, que sigue manteniendo su confianza en Benítez. Por delante, el Celta debe afrontar tres importantes partidos, dos a domicilio (ante Osasuna y Getafe) y otro en casa (recibiendo al Barcelona), que determinarán el futuro de Benítez como entrenador del Celta.