Murcia - Publicado el - Actualizado
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La salud auditiva es importante para nuestro día a día. Escuchar a los demás, para comprender, para aprender, para vivir en el mundo... Y si pensamos en el futuro, todavía cobra más importancia el hacer ciertas rutinas para retrasar el envejecimiento. Desde 2007, la Organización Mundial de la Salud ha impulsado el Día Mundial de la Audición, para conseguir la detección temprana de cualquier tipo de problema o deterioro auditivo que se pueda presentar en las personas de todo el mundo.
Hay datos preocupantes y es que cada vez son más, alrededor de un 25% las personas de la población los que necesitan algún tipo de tratamiento, como nos explica el Doctor Díaz Caparros. La gravedad es mayor, porque el oído es vital para el proceso de aprendizaje de los niños y en niños y en adultos es fundamental para muchas de nuestras emociones.
Retrasar ciertas enfermedades
Hay mucho por avanzar en el capítulo de la prevención. Como ocurre con otros especialistas, se deberían hacer pruebas y consultas antes de que llegue un problema serio, pero Díaz Caparros reconoce que son pocos los que van a prevenir incluso algo tan sencillo como un tapón de cera. Con unas buenas rutinas, podemos retrasar el envejecimiento.
Evitar los ruidos muy fuertes y directos, como el uso de auriculares con alto volumen, o la exposición a la televisión puede ayudar en esas buenas rutinas. No hacer uso de los bastoncillos es fundamental. Es un órgano muy sensible.
Las demencias, el Alzheimer, las amnesias se adelantan en personas que tienen pérdida de audición, porque afecta a las funciones cognitivas. Además, es un problema social. Las conversaciones empiezan a ser vagas, con respuestas inadecuadas y se van extinguiendo las relaciones sociales en los casos más complejos. Puede ser una fuente directa para la depresión.
Eliminar los prejuicios
Los audífonos son cada vez más pequeños. Las tecnologías los han mejorado tanto que ya en muchos casos no llevan ni pilas. Adaptan el ruido externo al problema de cada paciente... sin embargo, todavía cuesta mucho reconocer los problemas auditivos y buscar soluciones. Llevar audífonos no es como llegar gafas, por lo que todavía los profesionales deben luchar contra los complejos que tienen los pacientes.
Estos aparatos son la mejor vía para seguir escuchando a los nietos, a la pareja... para seguir conectados al mundo que nos rodea siempre que se quiera estar conectado.