Qué opina COPE de: el Papa Francisco
Descubre alguna de las líneas editoriales más importantes de COPE durante este 2020 sobre el Papa Francisco
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Un año complicado marcado por la pandemia de la covid-19. La preocupación del Papa Francisco por la situación a nivel global ha estado presente y a lo largo de estos meses ha querido mandar un mensaje de compromiso y confianza para superar entre todos los efectos más devastadores del coronavirus, sin olvidar otras cuestiones sociales que siguen siendo protagonistas del debate social. A continuación repasamos las líneas editoriales más importantes que han tenido como protagonista al Papa Francisco.
El Papa reivindica el multilateralismo. 10.01.2020
El Papa no se ha andado por las ramas al describir el estado del mundo al inicio del nuevo año, marcado por la intensificación de las tensiones y la violencia. En su tradicional discurso a los embajadores ante la Santa Sede, Francisco se ha detenido de modo especial en Oriente Próximo. También ha llamado la atención sobre la penosa situación de migrantes y refugiados, y ha pedido que deje de utilizarse de modo discriminatorio la palabra «minorías», que muchas veces relega a la condición de ciudadanos de segunda a grupos enteros de ciudadanos por su pertenencia religiosa.
La Iglesia reclama sociedades inclusivas, con iguales derechos para todos los ciudadanos, y donde quienes piensan de manera diferente son capaces de sentarse a dialogar. Así son también las relaciones internacionales que promueve la Santa Sede. Francisco ha hecho ante los embajadores una defensa explícita del multilateralismo, hoy en crisis por el repliegue de Estados Unidos y el avance del nacionalismo. En el año en que van a cumplirse los 75 años de la Carta de las Naciones Unidas, el Papa ha proclamado que siguen vigentes los principios de la organización. Eso sí, advirtiendo de que solo el reconocimiento efectivo e incondicional de la dignidad humana garantiza el respeto a los derechos humanos que debe sostener el sistema internacional. La paz no puede darse por garantizada. Y, como advertencia, ha aludido a una de las imágenes más impactantes de 2019, el incendio de la catedral de Notre Dame, que demuestra qué fácil es destruir lo que parecía más sólido.
El sueño del Papa Francisco sobre la Amazonía 12.02.2020
Fruto de los trabajos y resonancias del Sínodo del pasado mes de octubre, el Papa acaba de hacer pública su Exhortación Apostólica «Querida Amazonía». Un precioso texto con el que Francisco ayuda al proceso de la encarnación del Evangelio en un mundo interconectado, en el que el equilibrio de nuestro planeta depende de la salud de la región amazónica. En un escrito breve, cargado de expresiones poéticas, de esperanza y de sana indignación, el Papa comparte el sueño de un mundo que sea capaz de proteger la creación de Dios, que frene los crímenes y las injusticias que se derivan de la codicia de una economía voraz, y que permita una sana convivencia entre pueblos y culturas diversos. Los pueblos originarios de la Amazonia deben ser preservados con sus culturas y tradiciones, pero también tienen derecho al testimonio del Evangelio.
El desafío para la Iglesia es encontrar nuevos caminos para encarnarlo en un territorio tan singular. En este sentido, el Papa ha querido superar la controversia que ha focalizado el Sínodo con el debate sobre la disciplina del celibato. Tras escuchar a todos, después de haber orado y meditado, Francisco ha decidido no introducir cambios o nuevas posibilidades en esta materia. En su carta invita a una respuesta valiente para que aquellas comunidades no se vean privadas del don de la Eucaristía. Insta a los obispos de la región al envío generoso de nuevos misioneros desde sus países. También pide un nuevo liderazgo de los laicos en sus comunidades y recuerda que en la Amazonía la fe se ha mantenido viva gracias a la presencia de mujeres fuertes y generosas, incluso cuando ningún sacerdote pasaba por allí. «Querida Amazonía» es una invitación al aliento del Evangelio de la misericordia, que sana y libera.
La incidencia del Papa. 28.06.2020
La dramática oración del Papa en una Plaza de San Pedro desértica ha sido una de las imágenes icónicas de la pandemia. Poco después, mientras Europa ofrecía un bochornoso espectáculo de división, volvía a escucharse la voz de Francisco allanando el camino a la solución que finalmente va abriéndose paso. Y de nuevo ha sido el sucesor de Pedro quien no ha dejado de salir en defensa de las naciones menos desarrolladas. La figura del Obispo de Roma es una referencia moral indiscutible hoy para todos, incluidos los no creyentes. En lo que respecta a los católicos, la fecha del 29 de junio, Día del Papa, no alude a un referente lejano, sino a una persona muy presente en la vida de fe de cada bautizado. La paradoja histórica es que nunca había sido menor el poder terrenal del Vaticano y de la Iglesia, y nunca había sido más incidente y cercana la figura del Papa para la mayoría de la gente.
La explicación de que la tecnología ha acercado la figura de Pedro a cada hogar no basta por sí misma. Los últimos Papas han llevado a cabo una profunda transformación del ejercicio del Ministerio Petrino, convirtiéndolo en una catequesis que alcanza a todos los rincones del mundo y desarrollando un magisterio fluido a través de sus intervenciones y con la autenticidad de su testimonio. La figura del Papa es garantía de unidad en una Iglesia donde conviven diferentes carismas, pero también encarna la tarea de la nueva evangelización que el mundo necesita, poniendo el foco en lo esencial del anuncio cristiano.
Recuperar la política como vocación y servicio al bien común. 05.10.2020
Corren malos tiempos para la Política, con mayúscula. Supeditada en la mayor parte de los casos a estrechas maniobras de partido, no suele mirar más allá del corto plazo, y con frecuencia está lastrada por comportamientos poco ejemplares. En este sentido, las palabras que el papa Francisco dedica a la Política en su encíclica Fratelli tutti, son tan sugerentes como esperanzadoras. Reconociendo los problemas de la coyuntura actual, que no son del todo nuevos, el Papa plantea si acaso puede funcionar el mundo sin política, y si puede haber un camino eficaz hacia la fraternidad universal y la paz social sin una «buena política».
Ante tantas formas mezquinas e inmediatistas de política, Francisco recuerda la grandeza que muestra cuando actúa siguiendo grandes principios y pensando en el bien común a largo plazo. Para hacer posible el desarrollo de una comunidad basada en la amistad social, hace falta el concurso de «la mejor política», capaz de valorar y promover la creatividad de los sujetos sociales. Quien se dedica a esta tarea tiene la seguridad de que no se pierde ninguno de sus trabajos realizados con amor, ningún cansancio generoso en la entrega para hacer mejor la vida de los demás. Por eso, en el surco abierto por sus predecesores, el papa Francisco convoca a rehabilitar la política como «una altísima vocación, una de las formas más preciosas de la caridad».
Fratelli Tutti: otra globalización es posible 11.10.2020
En estos tiempos de renacer de las tensiones nacionalistas en todo el mundo, el Papa es visto como un paladín del multilateralismo. En su última encíclica defiende la necesidad de una cierta autoridad mundial con capacidad de actuación real que permita a la comunidad internacional abordar de forma coordinada cuestiones como los fenómenos migratorios, el cambio climático o la lucha contra la pobreza. Al mismo tiempo, Francisco es un gran crítico de la globalización en su forma actual. Desde luego, por favorecer diversas formas de desigualdad e injusticia, pero también porque promueve una especie de homogeneización cultural a las distintas sociedades. El Papa defiende el respeto a las tradiciones de las diferentes comunidades, con la condición de que ello no las lleve a aislarse ni a considerarse por encima del resto. Lo universal y lo local deben ir de la mano.
Esta es, probablemente, una de las aportaciones más originales de Fratelli tutti, que plantea otra forma de globalización. El punto de partida del respeto al otro es, en cierto modo, el respeto a uno mismo y a la propia historia y tradiciones, para desde ahí abrirse al encuentro del otro. Se trata de superar una mentalidad tecnocrática y consumista, sumamente empobrecedora, con su correlato de una globalización para la cual el mundo no es más que un gran mercado, en el que la persona solo vale en función de lo que tiene.