Un dermatólogo alerta de los riesgos de bañarse en piscinas con cloro: atento si salen estas manchas

¿En cuántas piscinas te has bañado en lo que va de verano? ¿Has sentido algo diferente en tu piel?

En 'Fin de Semana' sabemos que durante estos días de mucho calor ha sido inevitable echarse un chapuzón en la piscina de tu barrio o en tu lugar de vacacioal, y es esto, precisamente, de lo que ha venido el dermatólogo, Dr. Martorell, del hospital de Manises en Valencia, a hablarnos.

Son de sobra conocidos los beneficios que tiene el agua de mar en nuestro cuerpo. Sin embargo, con el agua de la piscina no ocurre lo mismo. Uno de los componentes de esta agua es el cloro, un desinfectante que se utiliza para combatir las posibles bacterias y hongos y así mantener el agua limpia. Pero, malas noticias para los amantes de los chapuzones en las piscinas: los efectos que tiene esta sustancia sobre nuestra piel,

¿Qué ocurre en nuestra piel al estar en contacto directo con el cloro?

El Dr. Martorell, ha explicado en COPE que el cloro es un producto químico que se usa para mantener el agua de las piscinas limpias, pero si nos bañamos con mucha frecuencia en estas, la piel del ser humano puede sufrir las consecuencias. "Tirantez , sequedad, picor y ojos rojos", son algunos de los síntomas que podremos notar en nuestro cuerpo según el dermatólogo.

El componente principal que causa la irritación es el hipoclorito de sodio, sin embargo nuestras mucosas también pueden sufrir ante la exposición a este componente. Por ejemplo, en ambientes cerrados puede ocasionar inflamación en nuestras vías respiratorias, no solo la piel, sino nuestra garganta o nariz pueden sufrir una irritación.

El Dr. contaba que podemos notar que en la piel está la presencia del hipoclorito de sodio porque esta se queda con aspecto blanquecino.

Qué consecuencias puede traer el baño frecuente en piscinas

El dermatólogo explicaba que alrededor del 20-25% de los niños sufre de dermatitis atópica, lo que significa que la persona que sufra de esto tiene una piel altamente sensible, y al exponerla con frecuencia al cloro de las piscinas puede aumentar la sensibilidad de la piel en los niños.

Si sufres de rosácesa, esto también te interesa. El cloro de las piscinas puede perjudicar la inflamación, aumentando las rojeces en la piel, sobre todo en la cara. En los adultos, la piel de nuestro rostro es la que más sufre al contacto con el cloro.

Qué medidas podemos tomar

Cada vez somos más conscientes a la hora de cuidar nuestra salud y sobre todo, con el auge de las redes sociales, muchos tenemos en cuenta el cuidado de la piel como un un paso más de nuestra rutina diaria.

Si te bañas en piscinas esporádicamente, seguramente no pase nada, pero si eres de los que va todos los días a la piscina deberías cuidar tu piel y tus ojos. Para hacerlo de la mejor manera, el Dr. Martorell nos ha recomendado:

-No pasar más de una hora seguida en las piscinas y de ser posible, no hacerlo todos los días

-Ducharse antes y después de bañarse en las piscinas

-Aplicar protector solar, que no solo hidrata la piel sino que nos protege de los rayor ultravioletas