Los signos en el cuerpo que tenía Esther López que hicieron sospechar a la jueza: "No era tonta"
Nacho Abad, periodista y criminólogo, detalla las claves del caso en 'Fin de Semana' y explica qué es lo que realmente pasó
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“Un arrebato en caliente”: esta es una de las conclusiones principales de la Guardia Civil sobre la muerte de Esther López, la joven de 35 años, de Traspinedo -en Valladolid-, cuyo cuerpo sin vida apareció en una cuneta hace casi 2 años.
“Un arrebato en caliente” que pudo tener Óscar, el único sospechoso de haberle causado la muerte a Esther, atropellándola de forma intencionada la noche del 13 de enero de 2022. Según la investigación, el propio Óscar se habría encargado de simular o preparar la escena en la que fue hallado el cadáver casi un mes después, el 5 de febrero.
Un informe de 400 folios en los que los investigadores de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil desarrollan, después de haber llevado a cabo recreaciones reales y por ordenador, del atropello sufrido por Esther y que acabó con su vida, lo que ocurrió aquella madrugada de enero.
Pero queremos saber todos los detalles del caso, y saber qué es lo que se sabe de la investigación hasta ahora. Detalles que nos cuenta Nacho Abad en Fin de Semana. Y es que todo comenzó con el documento definitivo que aportaba la Guardia Civil, reconstruyendo el atropello en 3D con grabaciones reales del accidente, “para que su señoría no tuviera que esforzarse mucho y viera qué es lo que sucedió la noche del crimen" explicaba el periodista y criminólogo.
Y es que, por lo que se intuyó, se trata de un atropello con la intención de matarla, por lo que a él le detienen, a pesar de que su versión incidía en la posibilidad de su inocencia. Lo que no sabía, es que le pillarían en un renuncio.
Los signos que hicieron sospechar a la jueza
Óscar insistió en su inocencia, asegurando que, mientras Esther caminaba y se iba, fue atropellada. Lo que no sabía es que le pillarían al preguntarle por datos técnicos, como por la razón por la que su coche estaba abollado, o por qué aseguraba que decía estaba durmiendo cuando la aplicación de la salud de su teléfono aseguraba que acababa de dar 118 pasos. O por qué su móvil le posicionaba fuera de casa y tenía unas llamadas de madrugada.
Aquí puedes escuchar todos los detalles del caso, dados por Nacho Abad en Fin de Semana:
"Cuando la atropella y la lanza, ella lleva el bolso y el móvil, en el maletero del coche hay tres restos de ADN de Esther, había que recoger el bolso y el móvil y como no lo encuentra, intenta llamarla para localizarlo. Hace dos llamadas telefónicas, se equivoca y llama al número antiguo y a dos personas que nada tienen que ver con Esther" decía.
La Guardia Civil, en vista de aquello, ya sospechaba, de lo que había podido ocurrir. Pero no fue hasta encontrar unos signos en su cuerpo, que todo cambió.
"Tiene unos pinchazos como de tenedor, creen que fue para comprobar si estaba viva o no. La jueza se dio cuenta de que mentía, ella dice que aunque se estime que la causa estime que es responsable del hecho, dice que no podemos olvidarnos de que nuestro derecho penal la muerte por atropello es de tres formas" expresaba.
Sin riesgo de fuga
Como explicaba Nacho Abad, la única posibilidad ahora mismo es el riesgo de fuga de Óscar, cosa con la que él discrepa porque, "si tienes un horizonte penal de 20 o 25 años de prisión, probablemente quieres quitarte de en medio. De forma cobarde en mi opinión, se llevó a Esther López a su casa, la tiene allí, a la que se va, se acuerda de que su padre va a ir al chalé, cuando vuelve, pasa por su coche por un lavado, está 17 minutos lavando el coche" sentenciaba.