¿Cuánto cobró Einstein por sus conferencias en España? Esta es, en euros, la bochornosa cantidad
Javier Sierra, escritor y periodista, cuenta en 'Herrera en COPE' las curiosidades más misteriosas de uno de los físicos más grandes de la historia
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Hace unos días se celebraba el centenario de Lola Flores y, en breves, se cumplirán 100 años de una curiosa efeméride que es la visita de España de Albert Einstein en 1923. El padre de la 'Teoría de la relatividad' se le trató como un jefe de Estado, y sus conferencias fueron muy aplaudidas. A alguien a quien ha interesado mucho esas pláticas ha sido a Javier Sierra, escritor y periodista, que como cada martes le escuchamos en 'Herrera en COPE' en 'Lo misterioso'.
Javier Sierra ha contado, durante la mañana de este martes, cómo fue esa gran visita de Albert Einstein a España. "Fue muy curiosa porque él tenía 44 años, a los 26 se había hecho muy famoso por el desarrollo de la 'Teoría de la relatividad', y varias instituciones españolas insistieron mucho en que viniera a dar unas conferencias a nuestro país", comenzaba explicando. Barcelona, Madrid y Zaragoza fueron las ciudades españolas por las que el físico pasó y en las que disfrutó. "Fue un tour bastante intenso, lo recibió Alfonso XIII en la Real Academia de Ciencias Exactas Físicas y Naturales de Madrid. Y, como curiosidad, en aquella época Albert Einstein cobró por esas conferencias 3.500 pesetas -21 euros al cambio a euros a día de hoy-. Estamos hablando de hace 100 años y era lo que ganaba un profesor de universidad en todo un año, es decir que estaba muy bien pagado. En Zaragoza eso sí, le pagaron 575 pesetas por cada una, pero es que él quería ir a ver El Pilar y La Seo", destacaba.
Einstein y su pasión por el misterio
Tal y como ha contado Javier Sierra, al físico se le atribuye una frase sobre el misterio: "Dice que, 'la emoción más hermosa que podemos experimentar es el misterio, es lo que subyace tras todo arte y ciencia verdaderos', y eso corresponde mucho con su personalidad, a pesar de que él no era religioso. Sin embargo, a medida que iba cumpliendo años se fue acercando a estas cosas", relataba.
Además, el periodista y escritor ha contado una anécdota acerca de una de las cartas que escribió Einstein a varios profesores de unviersidades, entre la que destacó la que envió Howard Rodman, en la que le invitaba a su casa a cenar para tener una conversación con él. Durante esa cena, en la que el profesor Rodman, que también era físico, iba acompañado de un estudiante, James Brown -que después sería un físico importante-, Einstein se le llevó a su estudio para mostrarle lo que tenía.
En la 'madriguera' de Einstein, Brown descubrió un misterioso libro, 'Isis sin velo' -de Helena Blavatsky-, una medium del siglo XIX, que creó una corriente religiosa llamada la Teosofía. Javier cuenta que en estas lecturas es donde él se inspiraba cuando se bloqueaba con las teorías, "porque cuenta historias tan alucinantes, tan fuera de la lógica, que hace que nuestro cerebro piense en otra dimensión. Este era el uso que hacía Einstein del misterio", contaba.
El episodio paranormal de Einstein
En Europa Central, Einstein tenía mucha relación con personajes de la élite intelectual, y uno de ellos era Freud, que estaba muy interesado en los fenómenos paranormales. "Un día invita a Einstein a su casa a tener una reunión con un sensitivo, que decía que tenía capacidades telepáticas", narraba Sierra. "Freud le transmite telepáticamente una orden al señor sensitivo. El señor se levanta, se va al cuarto de baño, coge unas pinzas de depilar, se acerca al bigote de Einstein y le arranca tres pelos del bigote. Y Freud se queda asombrado porque justo es lo que le había ordenado al sensitivo", contaba misteriosamente, una acción que al físico le impresionó vivamente y "lo mencionaba como anécdota en muchas ocasiones".